Los santiagueses ganaron la batalla táctica y fueron muy superiores al Celta B: 0-3
06 dic 2020 . Actualizado a las 19:23 h.El derbi no tuvo color. El Compostela ideó el plan perfecto y lo ejecutó sin una sola tachadura en Barreiro ante un Celta B maniatado y sin margen de maniobra. Los santiagueses salieron mejor en las dos partes y plasmaron su superioridad en la media hora final sin encontrar oposición en un filial que no tuvo su día.
El primer tiempo del derbi de Barreiro resultó de lo más movido. Con el Compostela, más intenso y mejor posicionado con la presión alta, mandando en el arranque y poniendo en aprietos aún Celta B que sufría en la salida de balón, en parte porque Jordan Holsgrove no tuvo su día. La pizarra de Yago Iglesias hacía estragos en el campo.
A los vigueses, con 300 espectadores en Barreiro, les costó entrar en el partido. Lo hicieron con dos remates acrobáticos de Manu Justo, el segundo con una chilena candidata a gol de la jornada si hubiese cogido portería.
Curiosamente, las mejores ocasiones del Compos llegaron cuando el partido estaba nivelado y el balón era celeste. Un robo en campo propio y un carrerón de Miki Villar acabó con un tiro que se estrelló en el palo y en el último minuto del primer tiempo un fallo de Lucas Cunha permitió a dos visitantes plantarse ante Iago Domínguez, que con una parada de balonmano le ganó el uno contra uno a Juampa. Fue la redención del portero vigués tras tres saques en falso que pudieron decantar la balanza.
Del Celta B apenas hubo noticias en la segunda mitad. Primo comenzó con el carrusel de ocasiones, siguió Miki Villar y tras un remate a la media vuelta de Josipovic, llegaron los goles de un Compostela que dominaba el partido con y sin balón y que hacía daño por las bandas.
Penalti decisivo
El principio del fin del derbi comenzó a escribirse a la hora de partido con un derribo de Bruninho al compostelanista Jimmy que acabó con el balón en el punto de penalti. Pablo Antas arriesgó con un lanzamiento alto, pero fuerte e inapelable para Iago Domínguez.
Con el 0-1 comenzó el baile de cambios y de sistema, que al Compostela no le hicieron ninfgún daño. De repente Onésimo tiró de los jugadores en dinámica del primer equipo que tenía en el banquillo (Carreira, Lautaro y Gabri) y pasó a jugar con tres centrales. La apuesta ni creó peligro ni cerró la hemorragia. Para entonces un Compostela lanzado y con espacios decidió cerrar el partido a lo grande con un tanto de Brais Abelenda con un tiro raso desde la frontal al saque de córner (pésimamente defendido) y con un servicio del propio Abelenda que Primo confirmó en el tercer tanto de la gélida mañana en Barreiro.
Un chute para el Compostela y una bofetada de realidad para un Celta B que el próximo domingo visita Riazor.
Celta B 0: Iago Domínguez, Ferrarés, Lucas, Carlos Domínguez (Carreira, min. 69), Pampín (Raúl, min. 83), Markel, Holsgrove, Alfon (Gabri, min. 77), Bruninho (Losada, min. 69), Manu Justo y Josipovic (Lautaro, min. 69).
Compostela 3:Pato Guillén, Saro, David Soto, Casas, Juampa (Josiño, min. 59), Bicho (Samu, min. 79), Pablo Antas (Palmás, min. 88), Miki Villar, Brais Abelenda, Jimmy (Baleato, min. 79) y Primo.
GOLES: 0-1, min. 62: Pablo Antas de penalti. 0-2, min. 85: Brais Abelenda. 0-3, min. 87: Primo.
ÁRBITRO: Fernández Pérez (Castilla León). Amarillas a Ferrarés y Pampín por el cuadro local y a Primo, Jimmy y Juampa por los visitantes.
INCIDENCIAS: 300 espectadores en el campo de Barreiro.
