El Celta cae goleado ante la Real Sociedad en Balaídos en un esperpéntico partido en donde falló todo, desde la pizarra hasta la puesta en escena

X.R.CASTRO

El Celta es una ruina. Dentro y fuera del campo. Porque al lío de la retirada de brazalete de Hugo Mallo le sucedió una sonrojante derrota ante la Real Sociedad que deja a Óscar García en una complicada situación. Los vigueses fueron un equipo sin alma, blando, falto de actitud, a merced del rival, mal posicionado en el campo y con un planteamiento tan erróneo que la Real Sociedad lo tuvo fácil para dar una soberbia lección de fútbol bajo la lluvia de Balaídos. Lo suyo fue un monólogo con festival de goles: 1-4. Óscar apostó por dos canteranos en los laterales, salió con un 4-4-2 y cambió dos veces de sistema, pero los vigueses nunca fueron un equipo. Un desastre que solo prolonga la agonía de un equipo en caída libre desde hace más de dos interminable años.

El proceso de autodestrucción en el que está empecinado el Celta tuvo su continuación en el peor sitio, el rectángulo de juego. Óscar García le dio una nueva vuelta de tuerca a su idea y apostó por un 4-4-2 con Carreira y Fontán como laterales y Baeza y Denis como extremos. Y el resultado fue ver al Celta convertido en un juguete de una Real que dominó el partido, el balón y marcó dos goles con extrema facilidad. El primero de cabeza de David Silva después de un centro de Barrenetxea y el segundo de Oyarzabal, que entró como quiso en una defensa de mantequilla. El capitán donostiarra se encontró con la mano de Rubén y su remate acabó en el palo, pero mientras tres zagueros vestidos de celeste apostaron por la vida contemplativa, el líder de la Real metió el muslo para marcar el 0-2.

Del Celta, roto, a la deriva y empequeñecido (se hartó de correr detrás del balón) apenas hubo noticias. Tan solo un par de intentos de Iago Aspas, con Nolito como escudero, que acabaron en el lateral de la red de Remiro. Nada que inquietase a una Real Sociedad que en el descanso ya tenía el partido encarrilado.

Los vigueses, ya con un 4-3-3 (sistema al que cambiaron con el 0-2) y con Brais y Aidoo en el campo, intentaron revivir en el arranque del segundo acto, pero después de un par de llegadas sin éxito un fallo incomprensible de Murillo permitió a Portu arrebatarle el balón en el pico del área y asistir para que Willian José marcase a placer.

El 0-3 fue una losa definitiva para el encuentro. El Celta entró en barrera, se desconectó todavía más y apenas fue capaz de emitir algún síntoma, lo que convirtió la recta final en un plácido paseo para los donostiarras, que recuperan el liderato, con un único punto de duda. El momento en el que Aspas marcó el 1-3 desde los once metros tras una caída de Brais ante Le Normand, que antes había desviado el balón limpiamente pero que en su caída impactó con el mosense.

Por un momento, el Celta intentó meterse en el partido, pero fue un espejismo. El tiempo que tardó en cometer el enésimo error defensivo para que Portu se comiese la banda (la izquierda celeste fue un desfiladero) para meter un centro para que Willian José cerrase la tarde marcando el cuarto. Nada de salva en el Celta. Ni el planteamiento, ni la elección de jugadores, ni la puesta en práctica. Un desastre.

Ficha técnica:

1. RC Celta: Rubén Blanco; Carreira, Araujo (Aidoo, min. 46), Murillo, Fontán; Beltrán (Santi Mina, min. 56), Tapia; Baeza (Brais Méndez, min. 46), Denis Suárez, Nolito (Emre Mor, min. 66); Aspas.

4. Real Sociedad: Remiro: Gorosabel (Arambarri, min. 64), Le Normand, Sagnan, Aihen; Zubimendi, Guridi (Guevara, min. 65), David Silva (Roberto López, min. 79); Barrenetxea (Merquelanz, min. 71), Oyarzabal (Portu, min. 46) y William Jose.

Goles: 0-1 Silva min. 24; 0-2 Oyarzabal min. 34; 0-3 William José, min. 54; 1-3 Aspas min. 77; 1-4 William José min.81

Árbitro: Cordera Vega (colegio cántabro). Expulsó a Fontán por doble tarjeta amarilla (min. 47 y min. 93) por parte del Celta; amonestó con amarilla a Guridi (min. 37), David Silva (min. 55), Zubimendi (min. 58), Aihen Muñiz (min. 63) por parte de la Real Sociedad.

Incidencias: Encuentro correspondiente a la octava jornada de la Liga Santander disputado en el estadio Abanca Balaídos.