A la pregunta de si les convencieron las explicaciones de Miñambres, no hay respuestas afirmativas. Sigue chirriando que Mouriño hablara de cuatro fichajes y no llegara ninguno y el límite salarial no les sirve de justificación porque, afirman, no era una sorpresa, sino un factor que ya conocían, dice Laborda, y es algo que también ha afectado al resto de equipos.
A Fraga le parece que el límite salarial es un aspecto descoocido por parte de la afición y que hay que tener en cuenta, pero no cree que valga como pretexto en este caso. «No vale coger y decir ahora que por ese motivo nos hemos quedado con un palmo de narices. Si estamos así será porque se había confeccionado una plantila con carencias y se están pagando los pecados de años anteriores», analiza. Recuerda que no se marchó nadie «vital», sin contar a Rafinha que no era propiedad del club.