Brais Méndez, el otro positivo detectado en los mismos test, ya había regresado hace unos días
29 ago 2020 . Actualizado a las 11:36 h.Los dos jugadores que dieron positivo en los test PCR del Celta previos al inicio de la pretemporada ya han superado la enfermedad y están a las órdenes de Óscar García Junyent. Primero fue Brais Méndez, que ya el pasado martes pudo comenzar a trabajar en A Madroa mientras Mina esperaba un nuevo negativo. Hoy, ha sido el vigués el que se ha sumado a sus compañeros.
Tras la sesión, el propio Mina compartía a través de una historia de Instagram la imagen suya en A Madroa que antes había subido el Celta. Añadía como breve texto «de vuelta» y varios iconos de felicidad y satisfacción, mostrando así su alegría por poder regresar a la normalidad tras este episodio.
Paralelamente a la vuelta al trabajo de Brais, trascendía un tercer positivo en la plantilla del Celta, el del guardameta Sergio Álvarez, que forma parte de una decena de positivos detectados en su localidad natal, Catoira. En realidad sería el cuarto, pues Carlos Mouriño reconoció otro caso tras el parón de Liga sin confirmar su identidad -el club no ha dado nombres de ninguno de los afectados-, aunque todo apunta a que se trataba de Pione Sisto, que se incorporó a los entrenamientos días más tarde que el resto.
En cuanto a Brais y Santi Mina, permanecieron asintomáticos, pero el resultado positivo de los test les obligó a recluirse en sus domicilio y cumplir la cuarentena de acuerdo con los protocolos establecidos. Ahora ambos están de regreso y solo queda que Sergio -que además se recupera de una lesión de rodilla- siga el mismo camino y pueda regresar al trabajo con normalidad.
