El desorden de Pione Sisto

GRADA DE RÍO

M.MORALEJO

El danés es tan capaz de salir de un atasco aparentemente imposible como de enredarse donde no debe

14 jun 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Cargar la derrota en el debe de Pione Sisto no sería justo, por más que el internacional danés tuviese una tarde aciaga. Para bien y para mal, es un jugador desordenado, imprevisible, tan capaz de salir de un atasco aparentemente imposible como de enredarse donde no debe. Con frecuencia, no escoge la opción más sencilla. Otras veces fue el factor desequilibrante a la hora de sumar los tres puntos.

Ante el Villarreal dilapidó la mejor aproximación al área amarilla del Celta. Controló junto a la línea de fondo, y se cayó. En el tramo final del encuentro las dos mejores ocasiones visitantes estuvieron precedidas de pérdidas de balón suyas en el medio campo. En el minuto 87 Bacca se plantó en el área y cruzó ante la salida de Rubén, parecía un gol hecho, pero el esférico salió fuera por muy poco. En el 90 el beneficiario fue Chukwueze, el más vertical. Llegó junto a otros tres compañeros, y acabó resolviendo Trigueros al tercer intento.

Pione Sisto no estuvo bien en las dos pérdidas, pero el equipo tampoco reaccionó como debiera en el repliegue. En ambas acciones había unos cincuenta metros hasta la línea de portería, y nadie fue capaz de frenar las dos acometidas visitantes.

Al Celta se le vio falto de identidad. Echando mano de la célebre frase de Menotti, no fue toro ni torero. Sin balón lo pasa mal, y lo tuvo muy poco porque ni consiguió hacer combinaciones largas ni evitar que el rival pudiese trenzar su fútbol.

El único dato positivo, aunque engañoso, es que a pesar de jugar de principio a fin al ritmo que marcaba el submarino amarillo, el equipo de Óscar García Junyet estuvo cerca de sumar un punto. Tras el descanso fue capaz de contener la avalancha, pero acabó perdiendo cuando más se desordenó.

Y tal como fue discurriendo la contienda, a lo más que podía aspirar era a sumar un punto. Solo puso en apuros a Asenjo en un centro de Olaza que tocó en un defensa, se envenenó y estuvo muy cerca de acabar en la red.