Cambios desde el 2017
En este tiempo, la peña ha mantenido intacta su filosofía como peña de animación y viajera, pero el verano del 2017 marcó un punto de inflexión. «Se dieron dos circunstancias, una que ya veníamos oliendo, y era que por la edad era difícil mantener un grupo de gente en Río Bajo y las condiciones (se sub-25) tenían fecha de caducidad y la otra, que el Celta hace el primer intento de reunir peñas en una grada de animación». Esa tentativa se rechazó y la peña se dividió en el estadio, con grupos en Marcador y Gol. «Ahí está la semilla de Siareiros Celta Vigo, el colectivo de animación de la grada Siareiros», desgrana. Un anhelo que compartían con otras peñas y un paso más en un crecimiento imparable.
Incluso en estos momentos de incertidumbre y ausencia de fútbol, tampoco están con los brazos cruzados. «Estamos organizando un torneo de FIFA y también hicimos una pequeña donación con Siareiros de material a un par de centros sanitarios del área de Vigo para echar una mano en lo que se pueda». Respecto al fútbol, no hay duda de que lo extrañan, pero Alberto está seguro de que cuando llegue el momento lo cogerán «con más ganas que nunca».