Rafinha para mí fue el mejor jugador del partido, no solo del Celta. Dio una lección en el Bernabéu, sobre todo a la hora de marcar los tiempos del encuentro. De saber cuándo el Celta tenía que correr y conservar la pelota. Lo veo en su mejor momento y considero que es uno de los grandes sustentos del equipo conjuntamente con Murillo y Rubén aunque cometiese un error ante el Madrid.
Además Rafinha y Iago Aspas se entienden a las mil maravillas porque al final los buenos y los inteligentes en el campo siempre se acaban encontrando. Son dos futbolistas excelentes en lo técnico y en entendimiento del juego están muy por encima de la media de la liga. Son dos de los grandes de la competición.
Por otra parte, el segundo gol del Celta es la definición de los dos protagonistas como jugadores. Porque Denis deja patente el talento y la visión de juego que tiene y Santi Mina es el jugador que va al espacio y que define. Al Celta le viene muy bien recuperar su mejor versión.
En el caso del centrocampista ya comenté que necesitaba un punto de inflexión y ese pase puede serlo. Denis llegó con unas expectativas que no se estaban cumpliendo y necesitaba un empujón. En el caso de Mina, meter el gol para sumar un punto tan importante siendo el primer balón que tocaba, siendo además su gol más característico, creo que le va a venir bien también.
