El filial celeste remontó tras sufrir la expulsión del portero con los cambios agotados
22 sep 2019 . Actualizado a las 18:12 h.Semana grande del Celta B que el pasado miércoles sumó su primera victoria en liga tras imponerse 4-2 al Melilla en el partido aplazado y ayer ganó al líder de forma inverosímil. Los de Jacobo Montes perdían por 3-2, jugaban con uno menos y habían agotado los tres cambios, por lo que Pampín se puso de portero. Quedaban veinte minutos y en el tramo final logró remontar de forma milagrosa.
Los primeros minutos fueron de tanteo. La igualdad reinaba en el césped, con los dos equipos muy bien plantados y sólidos, sin dejar que se llegara a las áreas. El primer zarpazo lo dio el Celta B, que en el minuto 13 se adelantó por medio de Apeh a la salida de un córner. El gol sentó fatal a los vigueses, que dieron un paso atrás y lo pagaron. El rival reaccionó y se fue en busca del empate con una presión muy fuerte que acabó por desarbolar a los de Jacobo Montes.
En el 23 llegó el gol del empate. Nacho recibió dentro del área, se revolvió y batió a Vieites. Tras la pausa para la hidratación, la Peña Deportiva siguió presionando y sometiendo al Celta B a vivir dentro de su campo y casi dentro de su área. Como la dinámica no cambiaba, el segundo gol local era cuestión de tiempo y llegó pasada la media hora, un activo Nacho fue objeto de penalti por una zaga celeste desbordada y cada vez más nerviosa y la correspondiente pena máxima la transformó Bernal.
Con el Celta B dormido, el palo evitaba el tercer gol en el minuto 38. Estrellaba el balón en él Fraile tras una gran jugada colectiva que no acabó en el poste porque Vieites repelió el rechace. Pero un minuto después sí que llegó el tercero de una Peña Deportiva desatada. Fran Vieites volvió a repeler un disparo de los locales pero el rechace le llegó a Marc Fraile, que no perdonó.
Tras el paso por vestuarios el Celta B mejoró, su centro del campo asumió más protagonismo también porque el Peña Deportiva dio un paso atrás y salió con la intención de conservar la renta y finiquitar el partido al contragolpe. Fruto de este mayor equilibrio el Celta B se volvió a meter en el partido en el 56 cuando redujo distancias gracias a una buena jugada de Jacobo que la culminaba batiendo a Javi Seral.
Poco después Marc Fraile tuvo el 4-2 pero lo desaprovechó. En el minuto 70 Fran Vieites vio la roja cuando Fran Núñez recibió un balón en profundidad y superó por alto al portero pero el balón se fue fuera. En esta jugada el meta celeste topó con el extremo local en el vértice del área. Hubo contacto, pero había más defensas en la jugada que podrían haber intervenido por lo que la interpretación de que era el último hombre era discutible. Pero Vieites fue expulsado y el Celta B había agotado los cambios por lo que Pampín se puso bajo palos.
Con uno menos y sin portero, sacar un resultado positivo parecía imposible, pero el Peña Deportiva ya no fue capaz de tirar a puerta. A la desesperada, el Celta B arañó una falta lateral y cuando todo el mundo pensaba que Jacobo colgaría el balón al área, disparó a puerta y sorprendió a Javi Seral. Era 3-3 en el 87. Parecía un buen botín, pero el filial se aprovechó de la caraja de los locales y Apeh, en el descuento, se fue en un contragolpe, se plantó ante el portero y le batió para sumar tres puntos que parecían una quimera minutos antes.
