1996: Tras días sonando como posible refuerzo del Celta, hace hoy 24 años se confirmaba la llegada al Celta de un jugador que iba a hacer historia y que es el único que -para cada vez menos aficionados- le discute a Iago Aspas -que tenía en él a su ídolo- el ser el mejor futbolista de la historia del club vigués. Porque el 20 de julio de 1996 se oficializaba el fichaje por el Celta de Alexander Mostovoi.

El ruso tenía entonces 27 años e iniciaba de esa manera una etapa vistiendo de celeste que, a pesar de los claroscuros sobre todo del inicio, se prolongaría durante ocho temporadas. En un primer momento, se comprometía por tres para formar parte de un Celta que en su segundo año lograría la segunda clasificación europea de su historia tras la de los años 70.

Mostovoi llegaba como un fichaje estrella. Internacional con la selección rusa, se convertía en el refuerzo más caro del club celeste, al que le costó 300 millones. Sin embargo, la época gloriosa de su paso por Vigo se hizo esperar. Su adaptación no fue fácil y su carácter jugó más de una mala pasada, quizá entre las más recordadas el famoso partido frente al Sporting de Gijón. En su primera temporada en el club, este luchó por la salvación -que acabó logrando- con Castro Santos al frente.

Finalmente, pocos dudas de que fueron más las luces que las sombras del apodado por el celtismo como El Zar, que participó en 270 partidos marcando 72 goles y siendo pieza imprescindible en los éxitos del EuroCelta que maravilló a finales de los años 90 y principios de la siguiente década, logrando incluso la primera clasificación para la Liga de Campeones en la historia del club.

Actualmente, Mostovoi es muy activo en la red social Instagram, donde a menudo comparte recuerdos relacionados con su etapa en el Celta y habla con cariño de lo que supuso para él.