¿Por qué y para qué el cambio de entrenador?

Julio Álvarez Buylla VIGO

GRADA DE RÍO

Oscar Vázquez

13 mar 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

El objetivo del fichaje de Escribá no se puede quedar solo en otro sistema más, en otro modelo de juego más o en otra elección de jugadores más. El actual entrenador del Celta tiene que generar y liderar el cambio.

Si  se quiere sobrevivir en la categoría, cuerpo técnico y jugadores tienen que darse cuenta que el camino actual no conduce a un buen final. Escribá debe trabajar sí o sí en lograr cambiar la mentalidad de un equipo que por momentos parece resignado a su destino en espera que ocurra el milagro Aspas. No actuar o seguir haciendo lo que se hacía parece mostrarnos claramente donde terminará el camino.

1 - LA CLAVE. Intensidad defensiva

Debut en casa del tercer entrenador. En frente un rival de juego combinativo y que deja jugar. El apoyo y la esperanza de la afición ante la enésima oportunidad de consumar la reacción. Los vigueses salen replegados entregando la iniciativa al rival. Replegarse es una manera de competir si defiendes con intensidad tu parcela para robar y salir a la contra. El Celta no defendió con intensidad ni por detrás ni por delante, dando la sensación más de acompañar que de encimar buscando la anticipación defensiva. Un dato: los vigueses son el cuarto equipo que menos faltas comete solo mejorado por Real Madrid, Betis y Barcelona.

2 - EL PARTIDO. El Celta no supo contrarrestar al rival

Esta vez y a diferencia de la primera vuelta, en la que Mohamed reaccionó tras el descanso igualando la disposición táctica del rival sobre el campo, los vigueses no fueron capaces de frenar el planteamiento del rival que, en superioridad en el centro del campo, volvió a encontrar los espacios a las espaldas de los medios centros y supo aprovechar los carriles laterales para generar peligro, sobre todo tras la entrada de Tello. Los vigueses dieron la impresión de afrontar el partido evitando los errores al máximo e intentando resguardar su portería en espera de aprovechar un descuido visitante. Con el paso de los minutos y el cansancio el equipo se fue alargando y el Betis solo tuvo que esperar su momento.

3 - EL ATAQUE. Un problema a día de hoy

Jugar en casa y tirar por primera vez a portería en el descuento es sinónimo de tener un problema a la hora de generar juego ofensivo. No es un problema nuevo ya que en las últimas jornadas y sobre todo desde la lesión de Aspas al equipo le cuesta mucho generar ocasiones de peligro. Maxi se encuentra excesivamente solo sin el jugador con el que formaba uno de los tándem más goleadores de la liga. Esta soledad le hace salir de su posición natural a zonas alejadas de la portería. Boufal no acaba de engranarse con el juego colectivo del equipo y Brais acusa tanto o más que Maxi la falta de un referente con el que asociarse. Lobotka, otrora enlace del medio con los atacantes está probablemente sufriendo la falta de continuidad y de una apuesta fija para un medio campo sin una pareja de referencia fija. Esperar se esperará por Aspas pero mientras son necesarias otras soluciones.