Noche oscura de los menos habituales en Anoeta

La Voz

GRADA DE RÍO

LOF

Kevin fue creciendo con el paso de los minutos, mientras que Hjulsager y Jozabed firmaron actuaciones muy discretas

27 nov 2018 . Actualizado a las 00:28 h.

Los focos ayer en Anoeta estaban puestos en los menos habituales. Las ausencias en forma de lesión y de sanción obligaron a Miguel Cardos a buscar soluciones en jugadores que apenas habían tenido minutos en esta Liga o que incluso ni siquiera habían debutado esta temporada. Jozabed Sánchez, Kevin Vázquez y Andrew Hjulsager tenían una oportunidad de oro para reivindicarse, pero el partido de Anoeta no resultó ser la mejor noche para aprovecharla.

Después de cosechar elogios unánimes en Copa ante el mismo rival, ayer Kevin tuvo que enfrentarse a un panorama más complicado al estrenarse en Liga por sanción de Hugo Mallo. El también canterano cometió errores en la primera parte y se vio penalizado por el hecho de que Emre Mor no le ayudara a tapar a Theo Hernández, que entraba con facilidad. El nigranés, sin embargo, fue mejorando con el paso de los minutos y rehaciéndose hasta el punto de protagonizar acciones de mérito en la recta final. Inició la jugada del gol de Maxi Gómez y se le vio más seguro en tareas defensivas al final.

Otro que había maravillado en Copa y que ayer se enfrentaba a una nueva reválida era Andrew Hjulsager. El danés, que también había tenido algunos buenos minutos en los últimos partidos de Liga, no estuvo nada afortunado anoche en Anoeta. Se le vio perdido, desaparecido por momentos y tomando constantemente decisiones que se revelaban equivocadas. Fue el segundo cambio de Miguel Cardoso, que dio entrada en su lugar a un Boufal que tampoco consiguió mejorar sus prestaciones.

Para Jozabed Sánchez los de ayer eran los primeros minutos de la temporada. Ya con Mohamed pasó de no contar absolutamente nada (no entró en ninguna convocatoria hasta la jornada 10) a ir al banquillo en los tres últimos partidos. Las bajas en el centro del campo hicieron que Miguel Cardoso apostara por él como titular en un partido en el que estuvo desacertado. La falta de ritmo y de confianza lastraron a un futbolista que, además, tuvo que actuar en una posición que le hace retroceder unos metros con respecto a su posición natural. Con todas las circunstancias en su contra, firmó una actuación de lo más discreto.