El moañés vivió ayer el primer entrenamiento de la concentración mundialista
29 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Iago Aspas ya está en Las Rozas descontando días de cara al mundial de Rusia. El moañés viajó en la mañana de ayer a Madrid por vía aérea y por la tarde quedó concentrado en la Ciudad del Fútbol de la RFEF, en donde permanecerá hasta el jueves de la próxima semana con el único intervalo del viaje a Villarreal para jugar el domingo ante Suiza el último amistoso antes de viajar a Krasnodar.
Para el máximo goleador del Celta se trata de su octava convocatoria consecutiva con Julen Lopetegui, convirtiéndose en el delantero que más veces ininterrumpidas ha ido a la selección desde noviembre de 2016.
Hace cuatro años estar en el Mundial de Rusia era una utopía para un Aspas que ni tenía minutos en el Sevilla, pero los tres años fantásticos que ha firmado en el Celta desde su regreso han cambiado el panorama y a día de hoy uno de los debates es si el moañés puede ser titular en el debut del Mundial ante Portugal. La prueba del domingo en el Madrigal (21 horas, Telecinco) puede ser un buen test.
El primer entrenamiento del equipo de Julen Lopetegui en Las Rozas contó con pocos aficionados (apenas 150) en las gradas de la sesión a puerta abierta por el aguacero que cayó hora y media antes, poco después de que los internacionales llegasen a la Ciudad del Fútbol. Tras una pequeña reunión del cuerpo técnico todos los convocados, menos los seis del Real Madrid que participaron en la final de la Champions ante el Liverpool, participaron junto a los siete jóvenes (Yeray, Núñez, Vallejo, Carlos Soler, Rodri, Oyarzabal y Williams) en una sesión de algo menos de una hora en la que el balón tuvo mucho protagonismo.
Además de varios ejercicios con balón, el entrenamiento finalizó con un pequeño partidillo. En la sesión se vio de buen humor a los internacionales. Fue la primera toma de contacto organizada por el cuerpo técnico, que ha ideado un plan de entrenamientos hasta el viaje a Krasnodar en el que predominan las sesiones matutinas, tras las cuales habrá atención a prensa, si bien el jueves habrá doble sesión, por lo que después la plantilla tendrá libre hasta las 13:30 del viernes. El sábado el equipo viajará hasta Vila-real, donde se ejercitará a puerta abierta en el Estadio de La Cerámica, escenario del partido del domingo ante Suiza. Después del mismo regresará a la Ciudad del Fútbol para ejercitarse el lunes por la mañana, teniendo la tarde libre. El martes habrá doble sesión y un evento para cerrar el trabajo en Madrid el jueves, tras una jornada libre, por la mañana. A las 14 horas de ese jueves día 7 la expedición pondrá rumbo a Krasnodar.
Para entonces ya debe estar casi recuperado Carvajal, el lateral del Real Madrid que se lesionó en la final de Champions que sufre una rotura muscular pero que llegará al Mundial.