La misma hambre de derbi con una pizca menos de pasión

M.V. F. VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

XOAN CARLOS GIL

La afición del Celta habla de partido «descafeinado», pero atractivo de todas formas

04 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Un derbi es un derbi, pero el de mañana un poco menos. Con todo el pescado vendido tanto de un lado como del otro, las peñas admiten que no va a ser como otras ocasiones y confiesan que el ambiente enrarecido está presidiendo las horas previas; ahora bien, no les cabe duda de que una vez que se vean en Balaídos y con el conjunto blanquiazul enfrente, al grueso de los aficionados se les va a olvidar que su equipo ya no tiene opciones reales de ir a Europa y que el rival jugará en Segunda el curso que viene: «Hay que ganar».

La palabra «descafeinado» que han rechazado los jugadores en los últimos días es, sin embargo, la más recurrente entre la afición. Con matices. «Es cierto que no se nota ambiente, que hay cierta apatía a la vez que un poco de cachondeo», confiesa Tomás Rodríguez, de Preferencia Celeste. Nadie pasa por alto la situación del Deportivo. «Les echaremos de menos el año que viene, al final a la mayoría nos gusta que haya derbis. Este sirve para despedirles, esperemos que ganando», comenta Marta Saiz, de Lechuzas Celestes.

A la tesis de esta última se suma Bele Dios, de Carcamáns. «É o típico de que a afección dun equipo quere o peor para o outro pero ao final non é o mesmo se falta un», señala. Sea como sea, desde A Illa viajarán cuatro autobuses como es habitual en cada jornada de Liga. «É un pouco aquilo de que vas porque hai que ir, como di o outro. Por moi descafeinado que sexa e pouco que se estea falando, alí estaremos», dice. En la misma línea, Tomás reconoce que si se tuviera que perder el partido no le daría tanta pena como en otras ocasiones: «Va a ser de los que vas porque pagaste el abono».

El Colectivo Nós es de los que se apunta de manera incondicional, por mucho que vaya a ser «un derbi distinto aos demais». «Na bancada vaise estar máis pendentes dos típicos cánticos de vacile ao rival que do propio partido. Ten máis pinta de rosconada de verán que de derbi», añade. Coincide Saiz, que le da otra vuelta de tuerca: «En un derbi se va a animar aunque sean los de pretemporada. Creo que los que tengan la sensación de que no va a haber tanto ambiente como otras veces se equivocan».

Desde Centolos Celestes, Javi Vaz está convencido de que están ante un partido en el que reinará su lema: el celtismo en positivo. «Va a ser un día para pasarlo bien. Es una sensación nueva al no jugarse nada ninguno, pero tiene el aliciente del pique entendido dentro de la rivalidad sana», valora. Nada de violencia ni agresividad, pero con el sentido del humor como aliciente. «Cuando nosotros perdimos se rieron y ahora nos toca», desgrana una idea en la que coinciden otros peñistas.

Otro aliciente, añade Abalde, es «seguir con esta racha nos últimos derbis» de victorias celestes. Para Saiz, «un derbi ilusiona siempre, aunque el partido sería más especial si el Celta se jugara algo, con el Deportivo enfrente o no». El rival sí es clave para José Alonso, de Irmandiños: «En este contexto, el único fin es hacer sorna con el rival. No hay la tensión típica porque, pase lo que pase, ya hemos salido victoriosos de nuestra batalla con ellos de este año».

Los peñistas consultados perciben también un «desencanto» en el celtismo que creen que es lo que más influye en el ambiente enrarecido. Ninguno hubiera pronosticado esta situación al conocer el calendario y además lamentan que siempre haya «aguas revueltas» que enturbian las vísperas de partidos como este. «En la primera vuelta había mucha más pasión», indica Tomás. Pero todos coinciden en que el deseo no ha cambiado: «Hay las mismas ganas de siempre de ganar al Deportivo».

Unos 400 aficionados del Deportivo estarán en un partido que no ha sido declarado de alto riesgo

O noso derbi en esta ocasión no ha sido declarado de alto riesgo aunque el partido contará con más máximas medidas de seguridad. La previsión apunta a la presencia de unos cuatro centenares de aficionados del Deportivo que se sentarán en Río Alto. Un número casi idéntico de fuerzas de seguridad velarán por que todo se desarrolle con plena normalidad.

Aunque a nivel clasificatorio no tenga nada en juego, la rivalidad en las gradas de Balaídos se mantendrá, aunque con menos gente. En Vigo el partido no apunta al lleno y la previsión en cuanto a aficionados del conjunto rival habla de 400 aficionados, repartidos en cinco autobuses y vehículos particulares. De los cinco viajes organizados cuatro proceden de A Coruña y el quinto de la Peña Deportivista de Verín.

Durante la semana, y aunque el partido ha estado en un segundo plano tanto en Vigo como en A Coruña, se han detectado en las redes sociales comentarios antisemitas que están siendo investigados por la policía con el fin de que no alteren el clima de convivencia que se está viviendo en el clásico en los últimos tiempos.

En cuanto al personal desplegado, y con independencia de que el partido no ha sido declarado de alto riesgo por la Comisión Nacional Antiviolencia, serán 400 los agentes de los diferentes cuerpos de seguridad del Estado los que velen por el normal desarrollo de un evento que por las circunstancias deportivas ha levantado menos expectación que nunca.

No se espera ningún tipo de incidentes siguiendo en la línea de los últimos años en donde O noso derbi parece que ha alcanzado la normalidad.