Unzué amplía su catálogo táctico

Xosé Ramón Castro
X. R. Castro VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

Óscar Vázquez

El Celta probó con buen resultado el 3-5-2, que le permitió ganar consistencia defensiva, tener superioridad en la medular y llegar con más efectivos arriba

20 abr 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

A falta de seis jornadas Juan Carlos Unzué le dio una vuelta de tuerca al catálogo táctico del Celta al apostar frente al Barcelona por un 1-3-5-2 como sistema de juego, quizás obligado por las ausencias de Hugo Mallo y el Tucu Hernández, pero que sobre el campo y ante el Barcelona funcionó. El navarro había comenzado la Liga con el 4-3-3 y en el partido de la primera vuelta ante el Athletic introdujo el matiz de colocar más por dentro a Iago Aspas para implantar un 4-4-2 que salvo modificaciones muy puntuales y concretas había permanecido inalterable desde entonces.

La nueva idea de juego -que le está dando unos resultados espectaculares al Betis- cambió la imagen de un Celta que parecía entrar en fase terminal después del partido de Butarque. Los cinco centrocampistas cambiaron el panorama. Para comenzar Lobokta estuvo más arropado, con dos jugadores como escuderos en la fase defensiva y con más líneas de pase a la hora de sacar el balón, ya que los vigueses tenían superioridad en esa zona del campo.

En ataque los célticos acumularon más efectivos que nunca. Wass y Pione Sisto en las bandas, con Iago Aspas, Maxi Gómez y Brais Méndez en zona de remate en la mayoría de las acciones. De hecho, el mosense disparó en tres ocasiones a la portería azulgrana, las mismas que Iago Aspas. También tuvo su clara opción llegando desde la segunda línea Jozabed.

En defensa, con una línea de tres centrales, el Celta transmitía una mayor seguridad. El Barça, con 14 tiros en su haber, se quedó en seis entre los tres palos: dos goles, un palo y tres paradas de Sergio Álvarez.

La duda estriba ahora en saber si Unzué seguirá apostando por esta idea que parece haberle insuflado sangre al conjunto vigués o sin Iago Aspas se ve obligado a retornar a la página anterior de su libreto táctico. Para jugar con dos nueves tendría que apostar por Maxi y Boyé, dos futbolistas de corte parecido. A nivel defensivo, Hugo Mallo podría ocupar el sitio del sancionado Jonny y Wass continuar en el carril derecho.

Otra de las incógnitas es el factor sorpresa, aunque seis jornadas después el cambio al Betis le sigue sentando de maravilla y el dibujo se ha convertido en el principal salvoconducto para Europa. El 3-5-2 ya fue utilizado en su día, y de un modo esporádico, por el Toto Berizzo, en determinados partidos en su época de entrenador del Celta. Un compatriota del excéltico, Carlos Bilardo, en el Mundial de 1986, fue el encargado de dar a conocer la idea.