Lucas Boyé se estrena en el banquillo

La Voz

GRADA DE RÍO

Oscar Vázquez

Pese a que apenas lleva una semana con el grupo Unzué le llama para medirse al Espanyol

11 feb 2018 . Actualizado a las 17:09 h.

Una semana en la dinámica del equipo ha resultado suficiente para que el argentino Lucas Boyé, cedido por el Torino, entre en su primera convocatoria y tengan opciones de poder disputar sus primeros minutos como celeste esta tarde.

«Sus sensacioens han sido buenas. Supongo que también ha influido positivamente que el grupo haya tenido una buena semana de trabajo. No tendrá cogidas las sinergias, pero lo he visto a un buen nivel», comentó Unzué del último refuerzo invernal del equipo.

El navarro defendió su fichaje en forma de cesión: «Si lo hemos traído es porque creemos que tiene unas virtudes muy buenas para entender el juego rápidamente y par adaptarse a lo que necesitamos. Está preparado para ir teniendo minutos».

Boyé, que puede jugar en las dos bandas o como media punta se erige en una nueva competencia para jugadores como Emre Mor, al que volvió a alabar el entrenador del Celta pese a sus pocos minutos. «Viene haciendo una progresión interesante. Seguro que no le he dado todos los minutos que él piensa que debería tener, pero mi objetivo es sacarle el máximo rendimiento al grupo».

Hernández y Cabral

En el análisis previo al partido con el Espanyol dos nombres estuvieron sobre la mesa debido a su poco protagonismo en las últimas fechas. Del Tucu Hernández comentó el entrenador que «no tengo ningún reproche hacia el. Ni de actitud ni de rendimiento. Radoja ha sido capaz en una posición diferente de elevar su nivel de rendimiento pero el Tucu tiene una personalidad y una jerarquía con el balón importante. Siempre dije que en el centro de la defensa y en el medio campo hay muchos puestos en donde siento que hay jugadores importantes».

Reconoció que había hablado esta semana con Cabral y matizó que «estoy poniendo a los que creo que están bien. Aquí lo importante es que estén rindiendo a buen nivel». No sería de extrañar que Roncaglia cediese el puesto a su compatriota.