El alcalde de Vigo negó cualquier tipo de retraso en las obras del estadio de Balaídos
12 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Las obras de la grada de Río provocaron el enésimo enfrentamiento entre Concello y oposición. Esta vez el detonante fue la ausencia de iluminación en la grada de Río. El concejal del grupo municipal del PP, Miguel Fidalgo, alerta de que a falta de diez días para recibir el Getafe en horario nocturno, «no hay ni un solo foco instalado en la grada», que apela al lema de la afouteza para «montar en diez días la iluminación provisional de toda una grada para que se pueda jugar y retransmitir un partido de fútbol, por culpa de la horrible gestión de este gobierno», remarca Fidalgo.
A la alarma generada por los populares le restó importancia el alcalde Abel Caballero. «Ya nos dijeron el año pasado que íbamos a jugar en Oporto y que no íbamos a jugar el primer partido en Balaídos, se equivocaron y no dimitió nadie. Lo que diga el PP da igual porque se equivocan siempre», criticó el mandatario socialista. «Basta con que digan que va a pasar algo para que no pase», remató.
La crítica del PP no se limita solamente en la ausencia de luz, también se quejan por el retraso «de más de 8 meses» en las obras y el «oscurantismo» en todo lo relacionado con el proyecto de la obra y en la relación institucional entre Concello y club. «Queremos luz para el jueves y queremos luz para saber cuál es el futuro del Celta», remató el senador vigués.
Caballero negó cualquier tipo de retraso en las obras. «Al PP le encantaría que la obra de Balaídos fuera mal, pero va en plazo, tiempo y forma», alegó el regidor que sostiene que esta misma semana se comenzará a instalar la parte central de la cubierta. «A finales de octubre estará todo Río cubierto y el 31 de diciembre la obra acabada», asegura el alcalde.
Sobre la modificación del proyecto de reforma de la grada y la ausencia de información sobre la misma que critican los populares, el regidor los acusó de no interesarse en encontrarla. «Hay que trabajar un poquito, está a su disposición. Pasó por junta de gobierno y por tanto es público», respondió.
En su crítica sobre la gestión de Balaídos y por la falta de entendimiento con el Celta, los populares denuncian que los aficionados del Celta llevan cuatro meses esperando por una solución a la continuidad del club en Vigo. Prometió que a final de temporada se sentaría con el Celta y anunciaría una solución, seguimos sin escucharle», lamenta Fidalgo, que también exige saber qué pasa con las facturas de la luz, «¿quién las tiene que pagar?», se pregunta.
Sin dar pistas sobre las negociaciones con Mouriño, el alcalde dejó caer que Feijoo trató de obstaculizar la continuidad del club en la ciudad. «Que pregunten si Feijoo estaba apoyando que el Celta se fuera a jugar fuera de Balaídos para siempre», concluyó.