Los operarios trabajan estos días en la retirada de la vieja cubierta
07 jul 2017 . Actualizado a las 09:27 h.Mientras el futuro del estadio se decide en un pulso político, los trabajos para adecuar Balaídos a los nuevos tiempos siguen su curso. Los operarios trabajan estos días en la retirada de la vieja cubierta de la grada de Río. La misma que obligó en el mes de febrero a aplazar el partido de liga contra el Real Madrid porque el temporal había levantado parte de la uralita que todavía sigue cubriendo el graderío. Pero le queda poco tiempo. Concretamente, dos semanas, según el alcalde de Vigo, Abel Caballero, que ayer visitó el estadio.
Tras la retirada de la cubierta comenzará la instalación de la nueva estructura para «estar a fin de año toda la obra de la grada absolutamente terminada», prometió el regidor. Un tiempo récord, ya que los trabajos en la zona comenzaron a mediados de mayo y en el contrato de licitación se marcó un plazo de un año para concluir la obra. Además, remarcó Caballero que la grada estará operativa para el primer partido de liga. Incluso se permitió la licencia de amenazar, en tono de broma, a los obreros con ponerlos delante de los aficionados que se queden sin asiento si la grada no está lista.
Explicó el regidor que «la parte incompatible con el fútbol es subir las estructuras metálicas», que soportarán después la fachada de la grada. «Es una parte delicada y compleja» y por eso se realiza en verano.
Antes de comenzar el desmantelamiento de la vieja estructura, se llevaron a cabo tareas «que requieren mucho cuidado: quitar todos los cables, la fibra óptica...», enumeró el mandatario socialista. Con ese tratamiento previo realizado, los trabajadores se centran ahora en el desmontaje de la estructura a la que va anclada la cubierta. «Se divide en once módulos, se sierran y se quitan. Es un trabajo que requiere de un tiempo porque su peso oscila entre las 5 y 14 toneladas», declaró Caballero, que finalizó su intervención recordando que, entre Concello y Diputación, invirtieron ya 13 millones en la reforma del estadio vigués.