El Celta apuesta por el once tipo y su plan más descarado en la ida de dieciseisavos ante el Shakhtar
16 feb 2017 . Actualizado a las 16:06 h.El Celta lleva doce partidos encima desde que comenzó el año, el Shakhtar dos meses parado, aunque con un carrusel de amistosos. A esta diferencia de ritmo, conjuntamente con el gen competitivo, se agarra el cuadro celeste para desafiar a uno de los grandes favoritos para ganar la Europa League como el equipo ucraniano para intentar superar una eliminatoria que a priori tiene claro color de la entidad de Donetsk.
Aunque el Celta se ha ganado el respeto de todos en los últimos tiempos. Hace un par de meses, cuando salió el sorteo, los ucranianos se frotaban las manos. Les había tocado en suerte un rival que se clasificó a última hora y que en la Liga española ocupaba una discreta posición intermedia. Pero la actuación de la tropa de Berizzo en la Copa del Rey, unida al partido desplegado el pasado domingo en el Calderón, han rebajado el nivel de euforia y activado las alertas.
El Shakhtar sigue siendo el gran favorito, algo que incluso es bueno para el Celta, que así se saca de encima una incómoda etiqueta, pero los vigueses ya han dejado claro que pueden competir con cualquiera. Igual de meridiano que el mensaje de ambición de Berizzo con su convocatoria, la misma del último partido en Liga ante el Atlético de Madrid. Europa no será territorio de rotaciones como en la fase de grupos, sino que apostará por su primera unidad. Alcanzados los dieciseisavos, y aunque quede una eternidad, nada se puede despreciar.
Por eso el técnico cruzalteño parece dispuesto a hacer una excepción en su tradicional hoja de ruta, dando un tercer partido consecutivo en una semana a su unidad A, incluido un Guidetti que por primera vez en todo el curso puede repetir dos titularidades seguidas. Que esté sancionado en Liga es un plus para apostar por él esta tarde.
Con respecto al once del Calderón, pueden repetir hasta nueve jugadores con los únicos cambios de Wass y Bongonda en detrimento de Jozabed y Pione Sisto. El movimiento más significativo se produce en el vértice ofensivo del trivote, prescindiendo de un media punta al uso para dar cabida a un jugador de más recorrido como el danés. Con esta propuesta, además, Iago Aspas seguirá partiendo de la banda derecha, aunque con libertad de movimientos.
Y aunque el equipo de Donetsk sea el favorito y cuente con arrobas de calidad y centímetros en ataque, el Celta no se amilana y mantendrá su plan. Los celestes quieren la posesión, estorbar en ataque y sumar goles. La experiencia del 0-0 con el Alavés invita a ir un paso más allá, aunque sin dejarse cegar dado el nivel del equipo que está enfrente.
Los ucranianos, que llegaron en la mañana de ayer a Vigo después de 12 días en Braga, no podrán contar para esta tarde con el internacional Taras Stepanenko, al que la UEFA sancionó por buscar intencionadamente la tercera amarilla en el quinto partido de la fase de grupos. No obstante, Paulo Fonseca, el técnico luso, cuenta con un plantel de lujo al que ha sumado durante el mercado invernal al argentino Gustavo Blanco, que de inicio será una bala en la recámara. Un estupendo desafío.