El Celta ha encajado 29 tantos que le convierten en el cuarto equipo más goleado de la Liga
15 dic 2016 . Actualizado a las 19:03 h.Por su fútbol ambicioso y ofensivo el Celta es un equipo que asume elevados riesgos en ataque, pero esta temporada el rendimiento defensivo está siendo especialmente flojo. Tras quince jornadas de Liga solo los tres equipos que están en descenso han encajado más goles que el grupo de Eduardo Berizzo, que tiene en el balón parado una parcela especialmente oscura.
CÓMO
En jugada y balón parado
A la hora de desgranar los 29 goles recibidos en Liga por el Celta, destacan las jugadas y las contras que le han costado a los vigueses 16 goles. Pero es el balón parado la herida que más escuece. Cinco tantos procedentes de saques de esquina y otros dos surgidos en faltas se encuentran en el historial de los del Toto. «Todo el mundo sabe que somos el equipo que recibimos más goles a balón parado, pero también somos, en mi opinión, de los que mejor fútbol hacen en España. No se puede tener todo, pero todo el equipo tenemos que ser más agresivos y más fuertes en la pelota detenida», razonaba ayer Théo Bongonda a la hora de valorar los problemas célticos. Nadie encaja a balón parado más que los vigueses, que también han recibido seis penaltis.
Dónde nacen
Desde el área grande
El área de penalti es la zona donde nacen la mayoría de los disparos que acaban en el fondo de la portería del Celta. Dieciocho de los 29 goles surgieron ahí, mientras que en el área pequeña se generaron tres, uno frente al Atlético de Madrid, el cabezazo de Piqué para poner el tercero del Barcelona en Balaídos, y el que Wass remató en propia puerta en Villarreal.
Los disparos
Las zonas más peligrosas
A la hora de disparar, acabe o no en gol, los rivales del Celta ejecutan el 59 % de los tiros en el área de penalti, mientras que tan solo el 3 % son acciones que se han generan en el área pequeña. El restante 38 % de los disparos que han efectuado los rivales del Celta han surgido fuera del área, y de ellos dos han cogido desprevenidos a defensa y portería, acabando en gol. El primero fue el trallazo que Kroos firmó para dar la victoria al Real Madrid, y el último el tiro bajo y por la derecha de Bakambú en la goleada del Villarreal. Ese 5-0 es hasta la fecha el marcador más cruel de los sufridos por los de Berizzo en la campaña. Tomando como referencia la orientación ofensiva de los contrarios, las estadísticas arrojan que es por el centro por donde más se internan los rivales, buscando el tiro desde el frente de la portería en el 67 % de las ocasiones. El 19 % de los disparos han surgido desde la zona izquierda y el 13 % desde el costado diestro.
Los tiempos
El peligro, tras el descanso
Las segundas partes están pasando una alta factura al Celta, que en los primeros cuarenta y cinco minutos solo ha recibido siete goles en toda la Liga, mientras que los 22 restantes se concentran en los segundos actos. El partido frente al Sevilla sirve de ejemplo de cuándo encajan los celestes. Iborra abrió la lata en el minuto 50, pero fue en el último tramo cuando sentenció. Justo a la vuelta de vestuarios y en las postrimerías de las contiendas, es cuando más sufre el Celta. Los vigueses han encajado entre los minutos 45 y 60 siete goles, entre el 60 y el 75 media docena, y a partir de la hora y cuarto la friolera de nueve tantos, es decir, casi el 30 %. Fueron los de Kroos para el Real Madrid, Griezzeman y Correa para el Atlético, Duje Cop para el Sporting de penalti, Piqué, Manu Trigueros en la goleada del Submarino, Kravets para el Granada e Iborra por partida doble. Las primeras partes, sin embargo, están mucho más despejadas. En los primeros cuartos de hora los vigueses han recibido tres tantos, entre los minutos 16 y 30 nadie ha conseguido batir a los de Berizzo, y entre la media hora y el minuto 45 han recibido cinco.
La portería
Por abajo y a la izquierda
La parte inferior izquierda de la portería del Celta es el hueco por el que Sergio Álvarez y Rubén Blanco, que se han turnado en la titularidad, han recibido la mayor parte de los goles en Liga. De los 29, 13 han entrado por ahí, mientras que el 28 %, es decir 8, lo hicieron por la parte inferior derecha. Cuatro goles cruzaron el marco celeste por la parte superior derecha y la zona central de la meta céltica ha sido el blanco de cuatro goles, dos por la zona superior y otros tantos por la inferior.