El grupo chino acelera su desembarco en el Celta con su llegada a Vigo

La Voz VIGO

GRADA DE RÍO

La presencia de una delegación de CITS en A Madroa y la sede de Príncipe, preludio del relevo

04 oct 2016 . Actualizado a las 13:32 h.

 La venta del Celta al grupo chino CITS está cada vez más cerca. La presencia en el día de ayer de una delegación asiática en Vigo para visitar las instalaciones del conjunto vigués en A Madroa y en la nueva sede de la calle Príncipe resulta una prueba fehaciente de que la cuenta atrás para el cambio de propietario ya ha comenzado, sin que hasta el momento el actual presidente del conjunto vigués ni el propio club hayan dicho una sola palabra sobre el relevo al resto de accionistas.

El día después de la victoria sobre el Barcelona fue surrealista en Vigo. Mientras el equipo entrenaba en A Madroa, una delegación del comprador desembarcaba en tres taxis en las instalaciones deportivas. No lo hacían solos, sino que junto a ellos estaban Esteve Calzada y Joan Román Minguell, de la agencia Prime Time Sport, una firma especializada en servicios de consultoría, márketing y finanzas en el mundo del deporte y que además lleva la representación de Josep Señé. Sin embargo, su estancia no duró ni cinco minutos. El tiempo que tardaron en ser descubiertos por los medios de comunicación que seguían el entrenamiento en abierto de la plantilla del Toto Berizzo.

Desde allí la comitiva, formada por una decena de personas, se dirigió a la futura sede celeste de la calle Príncipe. Pero de nuevo sus intenciones de visitar las obras quedaron frustradas. Poco antes de las doce de la mañana un primer taxi, con cuatro integrantes de la expedición china -tres hombres y una mujer- se bajaban frente al edificio, en la parte alta de la calle Velázquez Moreno. Y de nuevo varios medios de comunicación les aguardaban.

Al ser preguntados por los motivos que les llevaban hasta allí, uno de los integrantes del grupo intentó echar balones fuera asegurando que llegaban desde San Francisco con el objetivo de visitar localizaciones cinematográficas en Vigo. Por lo visto, la primera había sido A Madroa y la segunda era la futura sede del Celta. Demasiadas coincidencias y pocas explicaciones.

A la vista de que tampoco podrían visitar sin luz y taquígrafos la futura sede celeste, de nuevo se subieron al taxi y pusieron rumbo a un lujoso hotel de la ciudad donde estaban hospedados. Sin embargo, todavía quedaba por ver un último giro surrealista. Unos instantes después de que el primer taxi se marchase, llegaron los otros dos en peregrinación, y de nuevo para evitar a los periodistas, dieron la vuelta en el inicio de la calle Velázquez Moreno.

Aunque ayer por la mañana la delegación china se quedó sin opción de ver el avance de las obras de la calle Príncipe, el edificio ya no les era extraño. Según fuentes consultadas, hace un par de meses una comitiva asiática ya se había desplazado hasta el lugar acompañada de un alto cargo del Celta.

Para completar la ajetreada jornada de ayer, la delegación china acudió a su hotel para comer y dejar de lado un rato los negocios. La expedición llegó a Vigo en el fin de semana y el domingo por la noche presenciaron en Balaídos la victoria del Celta ante el vigente campeón.

La operación de venta parece estar cerrada y solo pendiente de cubrir los plazos pactados y de resolver la compra de los accionistas minoritarios que han sido tocados en los últimos meses, algunos de ellos con ultimátums para vender durante esta semana al precio de 12 euros por acción, muy por debajo de la valoración que han alcanzado los títulos en el acuerdo de venta entre el accionista mayoritario del Celta, Carlos Mouriño, y CITS, una empresa con sedes en Pekín y Suzhou, y que en su día solicitó la auditoría del Celta a la consultora BDO. 

«Non estamos intranquilos», dice el segundo capitán

Sergio Álvarez, el segundo capitán del cuadro vigués, comentó que los jugadores se mantenían al margen del proceso de venta y que la tranquilidad imperaba en el seno del vestuario.

«Non é unha cuestión que nos incumba a nós, somos traballadores e non temos nada que opinar nese caso. Non estamos intranquilos porque tampouco nos transmiten nada diso. O presidente transmite tranquilidade dende que está el e non nos di nada», comentó Sergio, mientras mostraba su optimismo de cara al futuro: «O club está nunha situación inmellorable e non ten por que cambiar, a cousa sempre ten que ir a mellor».

En su reflexión también tuvo palabras de elogio para el trabajo que Carlos Mouriño ha venido desarrollado en el Celta: «Creo que toda a xestión que leva facendo ata agora non ten ningún de reproche. Está deixando ao club nunha situación inmellorable, saneado e facendo moitas cousas boas. Creo que fixo unha xestión inmellorable e seguro que agora fará o mellor para este club».

Los empleados no deportivos tampoco tienen noticias.