El alta de Cabral y la lesión de Marcelo marcan la visita del Celta al Bernabéu
27 ago 2016 . Actualizado a las 19:03 h.Sin Marcelo, con Radoja tocado y con la necesidad de cambiar diametralmente la imagen dada el pasado lunes. Así afronta el Celta la salida de esta tarde al Bernabéu para medirse a un Real Madrid que ha comenzado la Liga muy enchufado y que para nada está notando la ausencia de Cristiano Ronaldo. A priori no parece un encuentro para que el cuadro de Berizzo reaccione tras el pésimo inicio de curso teniendo en cuenta los precedentes en el feudo madridista, pero si el Celta recupera su mejor versión quizás tenga algo que decir en el partido.
La novedad más importante para la contienda es la vuelta de Cabral. El central argentino recibió el indulto a finales de la semana pasada, entrenó con el resto de sus compañeros y ha sido incluido en la lista. Todo indica que para ser titular, puede que haciendo dupla con Sergi Gómez, lo que conformaría el cuarteto defensivo del curso pasado.
En ataque Iago Aspas se recuperó a tiempo de su golpe en la cadera y recibió el alta. El moañés será con probabilidad la referencia ofensiva en un tridente en donde puede haber cambios en las bandas. Parece difícil mantener la idea del ataque total en el Bernabéu y quizás Orellana pase a jugar en banda, lo que abre el debate entre Bongonda y Pione Sisto para la izquierda. El belga debería estar por delante a día de hoy aunque el danés haya sido el fichaje estrella de lo que va de verano.
Pero la gran duda aparece en la sala de máquinas. Porque para comenzar Berizzo tiene tocados a sus dos mediocentros defensivos. Marcelo tiene para tres semanas por otra rotura fibrilar y Radoja está entre algodones tras un verano en donde estuvo parado. Sin embargo la alternativa número 1 parece hacer forzar a Nemanja y luego dar cabida a un plan B. Para esta segunda opción está Pape o incluso Hugo Mallo, que a lo largo de la pretemporada ha jugado como mediocentro en más de una oportunidad.
En cualquier caso el Celta no renunciará a ser protagonista. Berizzo quiere el balón porque considera que defenderse en el Bernabéu es sinónimo de muerte segura. Al mismo tiempo pide inteligencia a su equipo y concentración para no irse nunca del partido. Siempre, partiendo de la base que el equipo recuperará su nivel del curso pasado en cuanto a intensidad y esfuerzo. De lo contrario, sería imposible dar la sorpresa.
Porque el Real Madrid sigue reuniendo a un grupo de peloteros temibles pese a la ausencia de Cristiano Ronaldo y Benzema, además de la baja de última hora de Isco. Asensio, Morata y Bale se han convertido en un trío letal en ataque, Casemiro le da fuerza y equilibrio en la medular para que puedan brillar Modric y Kroos y en defensa Zidane recupera a Pepe, aunque no está claro que vaya a salir de inicio.
Todo un elenco de lujo para un equipo que llega lanzado desde Anoeta, en donde abrió el curso con un cómodo 0-3 y que además esta tarde se presenta en casa ante su afición, lo que hace aventurar un llenó en el coliseo blanco.
El Real Madrid es el único de los grandes que se resiste a Berizzo desde que llegó al banquillo del conjunto vigués. La última victoria sobre los blancos data de los tiempos de Luis Enrique, aunque en Balaídos. Los celestes no ganan en el recinto madrileño desde la campaña 06/07 (1-2).
Lo único que juega a favor del Celta es la falta absoluta de presión. La mala imagen del lunes y la diferencia de nivel entre los dos equipos dejan a los vigueses en el papel de comparsa. El mejor escenario para poder sorprender.