El Celta puede aprovechar el traspiés del Athletic si vuelve a la senda del triunfo en Balaídos
25 abr 2016 . Actualizado a las 17:30 h.El Celta comienza esta noche la lucha por el tercer objetivo. Certificada la permanencia desde hace tiempo y la clasificación para la Europa League en la tarde de ayer, todas las miradas se centran ahora en alcanzar el quinto puesto que evite todas las previas estivales, una opción que además se pone de cara en esta jornada después de que el Athletic solo pudiese salvar un punto en su visita al Levante. Si los vigueses son capaces de superar al Granada, llegarán con dos puntos de margen a San Mamés para la final del próximo domingo. Y al mismo tiempo recuperarían los cinco de margen sobre el Sevilla, que ayer no falló en el derbi de su ciudad.
Para que salgan los números, el Celta debe superar tres obstáculos. El primero, un rival que se juega la vida y que tiene un ataque de vértigo. Por eso la fiabilidad en el pase se antoja crucial para evitar sustos en forma de contra. Berizzo pidió paciencia, mover el balón de lado a lado y escoger siempre la mejor opción, sin obcecarse con la primera.
Este argumento entronca de un modo directo con el segundo de los hándicaps. De un tiempo a esta parte el Celta no solo marca menos, sino que ha menguado su estadística de disparos a portería. «No tengo una explicación exacta. Algunas veces pecamos de imprudentes o precipitados. Somos un equipo que aporta mucha gente en ataque y a veces necesitamos de esa precisión o del buen día para encontrar la jugada correcta. Somos un equipo que genera en ataque las suficientes oportunidades para ganar y ojalá mañana (por hoy) no solo las creemos, sino que las aprovechemos», comentó Berizzo.
Y los problemas de cara a la portería rival ejercen como lastre para que el Celta se reencuentre con el triunfo en casa. Los vigueses han empatado sus dos últimas citas como locales y no ganan en Balaídos desde el 12 de marzo, cuando superaron por la mínima a la Real Sociedad.
Con los dos grandes retos del curso conseguidos, los célticos pueden afrontan la contienda sin ninguna presión y en una posición envidiable para dar un nuevo hachazo ahora que comienza la cuenta atrás. «Primero hay que meterse en Europa y luego hay que evitar en lo posible la séptima plaza que obliga a una planificación diferente, esa es una cosa que tenemos encendida en nuestro panel de alarma», comentó Berizzo dando portazo a cualquier atisbo de posible relajación.
Los célticos saltarán a un campo que ha colgado el cartel de lleno desde el pasado viernes. El celtismo, después de una década dura con bajada a los infiernos incluida, quiere celebrar lo que parecía una utopía no hace mucho. La escenografía del partido se completa con Gil Manzano como colegiado, un árbitro cuyas actuaciones han dado motivos para discrepar.
Las altas de Hugo y Wass aumentan las alternativas
Berizzo dispone de 18 jugadores de la primera plantilla para recibir esta noche al Granada. Un dato casi inédito a lo largo de la segunda vuelta en el conjunto vigués, lastrado siempre por lesiones y sanciones.
Las altas de Hugo Mallo y de Daniel Wass, que se hicieron efectivas en la jornada de ayer, abren el abanico de posibilidades para el once. Todo apunta a que el capitán recuperará la titularidad en el lateral derecho, pasando Jonny de nuevo al izquierdo. El segundo cambio con respecto al equipo que empató en Cornellá es una declaración de intenciones, ya que Radoja cedería su puesto a Guidetti, lo que significa que los celestes se quedarían con un doble pivote formado por Marcelo y el Tucu Hernández, dejando el ataque para Orellana como enganche por detrás de tres delanteros: Aspas, Guidetti y Nolito, una idea muy del gusto del Toto.
En el Granada, al final se recuperó Miguel Lopes y ocupará el lateral derecho, pero llega con la baja de cinco jugadores, pero envalentonado por su último triunfo .