Berizzo confirma la vuelta de O Gato a la portería del Celta pero incide en seguir con las rotaciones
12 mar 2016 . Actualizado a las 17:10 h.Sergio Álvarez vuelve a la portería del Celta, pero no para quedarse. Berizzo porfía en su decisión de seguir rotando en la guarida del Celta en la diez jornadas que restan descartando que su decisión pueda estar generando desconfianza. Al contrario, sostiene que O Gato le ha ayudado a ganar puntos en los últimos partidos que disputó y que Rubén Blanco están dando una buena talla. De hecho, para el Toto, fue de los más destacados en el Bernabéu pese al 7-1.
«Va a atajar Sergio en esta oportunidad, pero no porque los goles le hayan afectado a la actuación de Rubén, que para mí ha tenido una muy buena actuación, inclusive después de recibir siete goles, porque él nos ha salvado de alguno más. Los siete goles no merman ni un centímetro mi confianza sobre él», comentó Berizzo en el momento de confirmar la vuelta del catoirense al once.
A Sergio le reconoce el entrenador que ha sido fundamental para sumar cuatro puntos en las contiendas con el Getafe y el Villarreal e incluso apuesta por que esta tarde volverá a ser un elemento muy importante. «Sergio que es el que ha sufrido un poco la rotación por no tener continuidad, en los últimos partidos que nos han permitido ganar en Getafe, empatar con el Villarreal y volverá a atajar y volverá a hacerlo igual de bien», dice.
Esta confianza no significa un cheque en blanco hasta el final de temporada ni un voto de confianza hacia la continuidad. La idea del Toto es volver a contar con Rubén, a quien considera un portero de futuro, más pronto que tarde y dar rienda suelta a la idea de la rotación. «Para este final de temporada me gustó la idea de que también tenga minutos el portero no habitual. No encuentro que el rendimiento se vea afectado por salir o entrar. Sergio ha hecho muy buenos partidos e inclusive Rubén ha parado muy bien», se defiende Berizzo.
En su argumentación, sostiene que las dudas sobre la alternancia vienen del exterior pero que nada tienen que ver con el pensamiento interior del plantel celeste. «A efectos de la mirada exterior el cambio de portero tiene una connotación de incertidumbre, pero no de puertas para adentro. Los dos son muy buenos, confiamos plenamente en los dos. Son diferentes, hacen cosas diferentes pero son fiables en todos los sentidos, y seguirán así hasta el final contando con toda nuestra confianza juegue quien juegue».
Cuatro novedades en el once en un partido para descartar a un adversario
El Celta inicia la cuenta atrás de las últimas diez jornadas con un partido para descartar a un rival como la Real Sociedad, que llega a Vigo con la única intención de subirse al último tren que le puede llevar a Europa.
Los vigueses afrontan la trascendental cita con cuatro novedades en el once: Sergio que regresa a la portería; Cabral que mandará en el eje defensivo después de cumplir el partido de sanción; Radoja, que compartirá por primera vez doble pivote con Marcelo en sustitución del lesionado Tucu Hernández y John Guidetti, por el sancionado Orellana.
La idea del Toto para la ocasión es fabricar un once lógico, que busque el balón y la iniciativa a través de la intensidad y la presión alta, pero que al mismo tiempo se bañe de pragmatismo ante un rival con un trazo grueso muy parecido: gran ataque, capacidad de desborde a través del uno contra uno, pero con licencias defensivas que le han penalizado a lo largo de todo el curso.
Sin el cuarteto de ataque
En esta ocasión Berizzo no podrá poner en liza a su ataque total. Frente al Villarreal sacó de inicio a un ataque formado por Orellana en la media punta, con Aspas, Guidetti y Nolito en vanguardia. Por segunda vez coincidirán los tres de arriba, pero la labor de enganche le queda en esta ocasión a Daniel Wass, el futbolista más polivalente de la plantilla y que vuelve a atravesar un excelente momento de forma.
La Real Sociedad también exhibirá un tridente de campanillas en Vigo, con el indultado Vela acompañando a un Jonathas que cada día se acerca más a su pletórica versión del Elche y con el joven Oyarzabal en el costado izquierdo. Dinamita para finalizar el fútbol que pueda generar Illarra, Prieto y Pardo en un centro del campo txuri urdin lleno de talento.
El escenario del partido se completa con el presumible silencio inicial de un sector del celtismo como protesta por las últimas decisiones del club hacia los aficionados y con el arbitraje de Martínez Munuera, con quien los vigueses no conocen la derrota.