Augusto Fernández realizó un buen partido ante el Córdoba ejerciendo como mediocentro junto a Krohn-Dehli. El argentino es un futbolista que, sobre todo, se caracteriza pro su trabajo y su esfuerzo y se adapta perfectamente a diversas posiciones. Aporta muchísimo trabajo en la zona del interior, pero el otro día el equipo salió con cuatro delanteros y lo que Berizzo quería era afianzar el mediocentro con dos jugadores de buena posición, trabajo y recorrido, y en ese papel Augusto cumple muy bien. Hay futbolistas que pueden adaptarse a diversos puestos, y Augusto es uno de ellos.
A mí en la demarcación en la que más me gusta es de interior porque, aun no siendo extremadamente virtuoso, se asocia muy bien y tiene muchísima llegada.
A la hora de readaptar a un jugador ofensivo a tareas defensivas lo primero es contener su vocación de llegada. Por ejemplo Radoja es el jugador que mejor interpreta el papel de mediocentro defensivo en el Celta, es un jugador con menos recorrido y más posicional, mientras que Augusto, si lo trasladamos a la banda, sus principales características son el recorrido, los movimientos ordenados y desordenados en paralelo a la línea y las diagonales, por lo que su adaptación pasa por controlar todos esos movimientos que tiene interiorizados. El mediocentro siempre es más posicional.
El partido de Córdoba estuvo muy marcado por el hecho de que se esperaba un rival replegado. Va a ser difícil que veamos más partidos de un Celta con cuatro delanteros, que de un Celta con un doble pivote como el último. Es más probable que se recurra a un centro del campo con Augusto, Krohn-Dehli y Álex López porque es difícil que el Celta vuelva a juntar cuatro delanteros con unas características tan marcadas.