La ilusión frente a la necesidad

Xosé Ramón Castro
x. r. castro VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

Oscar Vázquez

El Celta, amparado por su cómoda clasificación, apuesta por la sorpresa ante un Barcelona tocado

01 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

El Celta afronta su partido más ilusionante. Con colchón, sin nada que perder y con todo por ganar. Desde su privilegiada sexta plaza rinde visita a un Barcelona herido pero líder. En teoría, el peor momento para visitar el Camp Nou y quebrar una racha que ya dura 72 años. Los vigueses no ganan en territorio catalán a los azulgranas desde los tiempos de Les Corts. Pero muy pocas veces se presentaron allí como el único equipo de Primera que todavía no ha perdido a domicilio.

Los vigueses se tomaron el partido con mimo. Viajaron en la mañana del viernes, entrenaron en la tarde de ayer en Barcelona y ahora esperan la contienda. A priori sin muchas novedades en el once. Se da por descontado el regreso de Fabián Orellana al costado derecho del ataque y la única duda aparece en el centro del campo con Álex López o el Tucu Hernández. Con más boletos para el ferrolano por su intensidad. Con respecto a Fontás, no está decidido que vaya a ir al banquillo.

El Celta no saldrá ante el Barça a tumba abierta, pero tampoco a taparse ni a jugar con cinco defensas, una idea desechada para la ocasión. Los celestes se han acostumbrado a vivir desde el balón y el protagonismo en los partidos y no quieren renunciar ni teniendo enfrente a un equipo plagado de estrellas. Consideran Berizzo y los suyos que la mejor manera de intentar frenar al rival es con el balón en los pies y con la presión en campo contrario. Solo con defenderse no basta ante semejante potencial.

El Barcelona, que tiene un pleno y que no ha encajado un solo gol en Liga como local, saldrá con todo. Será el estreno oficial de Luis Suárez en el Camp Nou después de jugar una hora en el clásico y el uruguayo formará tridente con Neymar y Messi en ataque. Todo un reto para la joven defensa celeste.

La única ausencia que padece Luis Enrique -que por primera vez se mide a su exequipo- es la de Iniesta, lesionado en el Santiago Bernabéu, aunque un centro del campo con Rakitic, Xavi y Busquets parece una garantía ante un rival como el Celta. Atrás, a Lucho le ha llegado el tiempo de rectificar en teoría, al apostar por Mascherano y Mathieu como centrales.

Pocos como Luis Enrique saben que el partido tiene trampa. A diferencia de todos sus visitantes anteriores, no tendrán un rival encerrado lo que puede propiciar el juego de espacios para sus puntas, pero a cambio puede sufrir en más de una ocasión las embestidas de Nolito, a quien el técnico recuperó para el fútbol, y Orellana por bandas. Y el incordio constante de un Larrivey que buscará su primer gol a domicilio. El argentino puede ser una pesadilla en la estrategia que tanto se le atraganta a los culés.

Otro factor importante será la respuesta del barcelonismo después de la imagen que el Barça dio en el clásico. De entrada, eso asegura que los culés saldrán enchufados de inicio, pero podrían pagar el peaje en función del desarrollo de la contienda.