Rubén Blanco tiene su mente puesta únicamente en la selección y en el partido que disputarán esta tarde contra Alemania. Sin embargo, no se le olvida que hoy se jugarán el pase al Europeo en el mismo escenario en el que hace un año celebró la salvación del Celta.
-¿Qué sintió al volver a ponerse bajo la portería de Balaídos un año después de la permanencia?
-Te vienen recuerdos muy bonitos de aquel día tan especial para todos los celtistas. Además, cuadró justo un año después. Contra el Espanyol jugamos el uno de junio, y contra Dinamarca fue el 31 de mayo.
-¿Estaba más tranquilo ante Dinamarca de lo que en aquella noche frente al Espanyol?
-Sí, la verdad es que un poquito más tranquilo sí estás.
-En los dos partidos que han jugado, frente a Lituania y Dinamarca, han tenido un espectador especial, Eduardo Berizzo. ¿Ya han tenido oportunidad de hablar con él?
-No hablamos nada con él, sabemos que estuvo, y es un gesto muy bonito por su parte.
-¿Ha pensado mucho en la próxima temporada, en que el técnico del Celta quiere probar a los tres porteros?
-No, ahora mismo solo estoy centrado en la selección. Estamos los tres, somos tres amigos, y que pase lo que tenga que pasar.