Un equipo de contrastes que maquilla su fragilidad defensiva con su efectividad en ataque

m. v. f. vigo / la voz

GRADA DE RÍO

02 nov 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

El Sevilla recibe hoy al Celta después del serio castigo sufrido en el Bernabéu (7-3). Un partido que evidenció de nuevo que los de Unai Emery son un equipo de contrastes: a la facilidad de la que disponen para marcar, le añaden una fragilidad defensiva que les ha colocado en la zona media de la tabla, por debajo de las expectativas que se habían creado para este equipo.

Los hispalenses son el cuarto conjunto más goleador de la Liga (20 tantos), pero también el segundo que más encaja (24 tantos, 2,18 por choque, en lo que va a de campeonato). De hecho, cuentan únicamente con un partido en el que no anotaron, que es también el único en el que no recibieron ningún gol: el 0-0 ante el Levante. Su primera victoria se hizo esperar hasta la jornada seis y después solo han sumado otras dos, siempre en casa, donde es primordial para ellos seguir sumando después de acumular más de un año sin vencer a domicilio.

Se trata de un equipo al que le gusta tener el balón y que ha conseguido más del 50 % de la posesión contra la mayoría de los rivales a los que se ha enfrentado. El esquema escogido habitualmente por Emery es un 4-2-3-1. El técnico ha sorprendido con decisiones tácticas inesperadas como retrasar la posición de Rakitic -máximo goleador del Sevilla con siete dianas hasta el momento- hasta la medular en vez de situarlo como mediapunta.

La fragilidad en defensa podría guardar relación con que el técnico no parece haber encontrado unos nombres fijos para esta línea. Especialmente para una pareja de centrales que no acaba de consolidarse.

El Sevilla vive de su movilidad en ataque y de su gran capacidad ofensiva. Pero estas cualidades se ven contrarrestadas por su falta de fluidez y regularidad. Los siete goles encajados el miércoles ante el Real Madrid desequilibraron la balanza de un equipo que, hasta ese momento, tenía el mismo número de goles a favor que en contra.

Los sevillistas han ganado sus tres últimos choques en casa, donde se han hecho fuertes tras un comienzo complicado. El de hoy será un partido entre dos equipos que vienen de ser goleados y que necesitan sumar.