El Celta no cerraba en Primera División una primera vuelta tan pobre desde la temporada 89/90, cuando sumó 15 puntos al ecuador del campeonato y acabó descendiendo. Desde entonces y hasta esta temporada la franja siempre se había situado en los 20 puntos o por encima. Sin embargo la derrota en Cornellá ha provocado que el equipo de Herrera se quedase en 18, lo que le obligará a apretar el acelerador en la segunda vuelta, en donde a priori tendrá que sumar un mínimo de 24 puntos para alcanzar la salvación.
Los vigueses alcanzan la mitad de la Liga siendo el conjunto con más derrotas (11), estadística marcada por el nefasto bagaje a domicilio, ya que de diez partidos como visitante el equipo ha perdido nueve y solo ha ganado en Zaragoza. Sin ningún empate. Curiosamente de esas diez derrotas, ocho han sido por la mínima. Solo Barcelona y Madrid ganaron por dos goles.
«Nos falta tensión. Nos falta que cada balón dividido lo luchemos, que cada rechace sea nuestro, estar juntos y a partir de ahí jugar nuestro fútbol. En Balaídos lo hacemos y fuera de casa no lo hacemos. El por qué no lo sé», comentó Mario Bermejo sobre la actitud del equipo en los partidos de fuera de casa tras caer ante el Espanyol. «Nos ha pasado lo de siempre fuera de casa», reconoció Roberto Lago.
Tomando como referencia los últimos 22 años, con una puntuación tan pobre el equipo fue capaz de salir en dos ocasiones, en el 93/94 y en la 00/01. En ambas firmó la permanencia.
En esta ocasión juega con el argumento a favor que pese a los 18 puntos el equipo no ha caído a los puestos de descenso ya que sus compañeros de Liga por la salvación siguen un ritmo similar en cuanto a puntuación.
Los números devuelven también al primer plano la falta de gol que Herrera considera que no tiene el Celta. Los vigueses acaban la primera vuela con 19 dianas, el cuarto equipo menos realizador de toda la categoría, y pese a sus fallos de bulto en la retaguardia, como el que propició el tanto del Espanyol, la defensa ha sido la mejor parada por la estadística de la primera vuelta. De los equipos de abajo solo el Osasuna ha recibido menos de los 24 goles que ha encajado el Celta.