El Celta se llevó ante el Valladolid su primera alegría del año, y, como si de un homenaje a la cantera se tratase, los tres goles celestes tuvieron firma gallega. Iago Aspas fue el bigoleador del encuentro en una mañana en la que Álex López debutó como goleador en Primera División. Marcó el tanto definitivo con un disparo ante el que nada pudo hacer Dani. «Tenía una posición muy clara. Le di con ganas y con fe, y salió bien, que es lo importante», comentó al respecto el futbolista.
El ferrolano reconoce que su tanto ante el Valladolid fue especial. «Para mí significa mucho. Es como cumplir un sueño, estoy muy contento. Se lo dedico a mi familia, a mi novia, a mis amigos y a toda la gente que siempre ha estado conmigo», añadía López, que se convierte así en el segundo centrocampista del Celta que marca esta temporada. El primero fue Augusto Fernández en el encuentro ante el Getafe.
El gol de Álex López ante los de Djukic reivindica la faceta más ofensivo del futbolista, una cara que no coge por sorpresa a Paco Herrera. «Álex es único jugador con disparo que tenemos. Hoy [por ayer] lo ha hecho desde fuera del área, y lo ha hecho bien», valoró el entrenador.
Un objetivo cumplido
Álex López se mostraba pletórico por su gol, pero sobre todo por la victoria de su equipo. «Todo ayuda a nivel de confianza y moral, pero hacer goles es algo que no me quita el sueño, lo importante es que el equipo gane. Era un partido muy importante porque nos podíamos meter en una situación complicada, y el equipo hizo muy buen trabajo. Casi no concedió, estuvimos bien delante, y es para estar satisfechos».
El mejor comienzo
«Ha sido un buen comienzo de año, y a ver si 2013 es igual de bueno que 2012», comentaba Borja Oubiña tras el partido. El capitán celeste señaló que ante el Valladolid «vivimos con más tranquilidad que otros encuentros en casa». «Empezamos bien, el partido se puso de cara y tras el gol intentamos seguir con la misma idea. Nos mantuvimos bien porque sabíamos que estábamos haciendo bien las cosas», dijo Oubiña, para el que el de ayer «podía ser un partido para hacer un gol más, pero lo importante era ganar».
De la misma idea es Andrés Túñez, para el que «fue un triunfo merecido. Hemos jugado muy bien. No se puede comenzar mejor el año y hay que seguir en esta línea de trabajo». El central cree que «fue un partido difícil, pero estuvimos acertados tanto atrás como adelante. Un partido redondo».
«Marcar el primer gol en Primera es como cumplir un sueño. Tuve una posición clara y lo tiré con fe»
Centrocampista del Celta