Ibai responde a los haters que critican su brutal pérdida de peso diciendo que «estaba mejor gordo»
GENTE
El creador de contenido vasco, uno de los que más suscriptores tiene en España, lleva más de cuatro meses realizando dieta y ejercicio físico diario tras alcanzar un peso de 170 kilos
12 nov 2024 . Actualizado a las 09:19 h.Ibai Llanos (Bilbao, 1995) es uno de los streamers más conocidos del país. Aunque en un principio se hizo conocido a través de internet por compartir sus partidas a videojuegos como el League of Legends (LoL), a partir del año 2019 su popularidad fue en aumento porque demostró dotes de comunicador, realizando entrevistas, organizando eventos como el Mundial de Globos o La Velada y narrando también eventos deportivos, como la presentación de Leo Messi, amigo suyo, con el París Saint-Germain en 2021. Otra de sus iniciativas, junto al exfutbolista y empresario Gerard Piqué, ha sido la organización de las Kings League y Queens League, torneos inspirados en el mundo del fútbol que siguen miles de personas. Solo en la plataforma Twitch, cuenta con más de 17 millones de seguidores, que valoran su estilo cercano.
Sin embargo, este verano, su estado de salud empezó a ser más preocupante que su éxito. Llegó a pesar, como él mismo reconoció, «más de 170 kilos» y fue visto en silla de ruedas por estar enfermo por covid a su regreso de la Kings World Cup disputada en México. Poco después de llenar el Santiago Bernabéu con La Velada del Año, evento de boxeo líder en audiencia en todo el mundo, anunció un cambio drástico en sus hábitos. Mediante dieta y ejercicio físico pretendía estar más sano. Y así fue.
Paulatinamente ha ido ganado la batalla frente a la obesidad. Pese a ello, quienes antes le criticaban por su peso, «han estado durante años llamándome gordo y obeso», ha señalado recientemente en la red social X, «ahora tienen que tirar de otra cosa, es normal», ha remarcado.
Y es que Llanos, que lleva más de tres meses entregado a la vida sana, ha estallado frente a las críticas que recibe por el mero hecho de mostrar un proceso del que se siente orgulloso. Entre los dañinos comentarios, algunos inciden en un aspecto «demacrado», que ligan a un posible consumo de drogas o a la toma de Ozempic, un medicamento recomendado para la pérdida de peso en casos extremos.
«No he hecho este cambio por estética. Lo he hecho por salud. Si me ven más feo o más guapo, me da igual», ha respondido molesto a los haters, personas que critican de forma dañina valiéndose del anonimato en redes sociales. «Ahora mismo soy mucho más feliz pudiendo subir escaleras sin ahogarme, pudiendo atarme los cordones de las zapatillas, pudiendo ponerme el cinturón del coche y poder dormir sin mascarilla porque pesaba 170 kilos», concluye sobre la exponencial mejoría que ha experimentado en este proceso.