El número uno del mundo se despide de la soltería con tres días de celebraciones por todo lo alto
09 jul 2014 . Actualizado a las 20:53 h.Tras su victoria en Wimbledon el pasado domingo, Novak Djokovic tiene desde hoy un motivo más para festejar. El tenista abandona la soltería y se casa con su novia, Jelena Ristic, que está embarazada y espera su bebé para el próximo mes de octubre. Ambos se comprometieron en septiembre tras ocho años de relación y por entonces festejaron el compromiso con una fiesta en Monte Carlo. La celebración comienza hoy con una exclusiva fiesta previa a la ceremonia nupcial que será mañana y celebrarán hasta el sábado, y por todo lo alto, en una elitista zona del adriático montenegrino.
Lo que los medios de Montenegro denominan como la «boda del siglo» será un acto íntimo, por deseo estricto de la pareja, lejos de las cámaras y espectáculos mediáticos, y entre grandes medidas de seguridad. El diario «Vijesti» habla hoy de un enorme despliegue de seguridad, con guardaespaldas privados, policías e incluso agentes antiterroristas que guardan cada rincón de Sveti Stefan, la localidad costera donde se celebra la boda.
Las autoridades locales han prohibido incluso el acceso a un parque situado a más de cien metros de la llamada «Playa de la Reina», en la que se celebrará mañana la boda.
Para esta noche está prevista una fiesta en un hotel de la localidad, una pequeña península con medio centenar de mansiones de lujo en las que se alojarán los 140 invitados. Djokovic y su futura esposa ocuparán toda la villa para la celebración de sus nupcias, que en el pasado ya ha albergado a estrellas de cine como Elizabeth Taylor, Sofia Loren o Silvester Stalone y a miembros de familias reales europeas.
Los preparativos de la boda, que costará medio millón de euros, se han llevado a cabo durante dos meses. La pareja contraerá matrimonio civil el jueves a las 16.30 GMT en una plaza situada en la playa, donde se celebrará también el convite nupcial. La boda eclesiástica, ya con menos invitados, se celebrará el día 12, día de San Pedro, cuando termina el periodo de ayuno que marca el calendario de la Iglesia ortodoxa serbia en la época estival. Además, se rumorea que el padrino de Djokovic será el también tenista Marc Stillitano.
Los empleados de los hoteles de Sveti Stefan han firmado contratos que les comprometen a guardar en secreto toda la información relacionada con la boda y no podrán introducir teléfonos móviles ni cámaras de foto a la zona. También se rumorea que entre los invitados se cuentan los entrenadores de Djokovic, Boris Becker y Marian Vajda, con sus esposas, y otros profesionales del mundo del tenis.