El extorero Juan Antonio Ruiz «Espartaco» concede una entrevista a la revista «Hoy Corazón», que también dedica un amplio espacio a la visita del heredero japonés
14 jun 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Simpatiquísimo, superamable y muy educado. Así se mostró el heredero de Japón, el príncipe Naruhito, durante su cena en el restaurante Sanxenxo de Madrid, uno de los locales del Grupo Combarro en la capital, en el elegante barrio de Salamanca (calle Ortega y Gasset). Está especializado en comida gallega.
El heredero japonés está de viaje por España esta semana, la sexta vez que llega a nuestro país, y, para la ocasión, ha diseñado una estancia muy gallega. Mañana estará en Compostela realizando un tramo del Camino de Santiago, y seguramente para abrir boca decidió conocer de primera mano los productos galaicos. Fue una cena privada, con un grupo de compatriotas, y el restaurante elegido, el Sanxenxo, una marisquería clásica. Allí degustó pescados y mariscos, mostrándose como un gran conocedor de los sabores. En todo momento fue muy amable con el personal, al que daba las gracias en español; incluso después de la cena pidió un café y lo hizo en el idioma de Cervantes.
La visita, que tiene un marcado carácter institucional, se completó con una cena de gala y una recepción de los reyes. De esta parte más oficial da buena cuenta la revista Hoy Corazón, que se podrá adquirir mañana con La Voz al precio de 0,30 euros. En sus páginas se dedica un amplio espacio a la visita del príncipe heredero de Japón, que en esta ocasión viajó sin su esposa, la princesa Masako, aquejada de depresión.
Además de la regia visita, Hoy Corazón publica una entrevista con el extorero Juan Antonio Ruiz Espartaco, quien habla de asuntos tan personales como el amor, y de sus hijos. Una jornada de playa de Lorena Bernal y Mikel Arteta y un resumen de lo que ganan las raquetas de oro del panorama internacional son otros de los asuntos de la revista.
Hoy Corazón dedica un espacio igualmente amplio a la cantante Alaska, quien ofrece una cara no muy habitual en ella, la de una mujer siempre amante del espectáculo pero muy centrada en su vida personal.