Estados Unidos estudia conceder el perdón póstumo a «Billy el niño»

Efe

GENTE

Al parecer el entonces gobernador de Nuevo México prometió al pistolero un indulto a cambio de que testificara en un juicio.

25 dic 2010 . Actualizado a las 20:33 h.

El gobernador de Nuevo México, Bill Richardson, estudia conceder el perdón póstumo al pistolero Henry McCarty, más conocido como «Billy el niño», al que se le atribuyen una veintena de asesinatos. «Es una decisión que tomaré después de revisar todos los documentos», dijo el gobernador en una entrevista en la cadena CNN.

Durante los últimos ocho años, el gobernador ha recibido docenas de cartas solicitando el perdón del joven forajido, también conocido como Henry Antrim y William H. Bonney, sus nombres falsos. El motivo de estas peticiones es la creencia generalizada de que el entonces gobernador de Nuevo México (1878-1881), Lew Wallace, prometió un indulto a «Billy el niño» a cambio de que testificara en un juicio por asesinato.

En concreto, se refiere a su presunta participación en el asesinato en 1878 del sheriff William Brady, un agente que se sospechaba que pertenecía a una facción rival durante las Guerras del Condado de Lincoln en Nuevo México.

En un esfuerzo por aclarar la cuestión, el estado de Nuevo México encargó a la abogada Randi McGinn la misión de revisar los antecedentes históricos para confirmar la veracidad de los hechos. McGinn ha revisado los antecedentes históricos que rodean estos eventos a través de diversos documentos, entrevistas personales y otros materiales, antes de determinar si existe base suficiente para considerar seriamente conceder el perdón.

El estado de Nuevo México aclara en su página web que la McGinn es una apasionada de la historia y llegó a un acuerdo con ella para que trabaje de forma voluntaria y sin costo para los contribuyentes. Después de concluir su revisión, McGinn señaló que había motivos para considerar los hechos y presentó una petición formal el pasado 14 de diciembre para que el gobernador Richardson perdone a Billy, como ofreció en su día el gobernador Wallace.

Richardson evaluará la petición y tomará una decisión después de las fiestas de Navidad pero antes de que finalice este año, indicó en un comunicado. El gobernador dejará su puesto en enero ya que tras las elecciones del pasado 2 de noviembre asumirá el cargo la también hispana Susana Martínez.

Para tomar la decisión correcta, Richardson ha solicitado la ayuda de aficionados a la historia, expertos en la materia y familiares de los afectados. «Esto es importante no sólo por lo que significa mantener la palabra dada, sino también en relación con el rico registro histórico del Viejo Oeste estadounidense, en el que Nuevo México tuvo un lugar único», aseguró. Sin embargo, los descendientes de Wallace se han manifestado en contra y aseguran que el entonces gobernador nunca ofreció el perdón al forajido a cambio de testificar en el juicio.

La fascinación por el personaje de «Billy el niño», un muchacho del que se desconoce la fecha de su nacimiento exacta -se cree que entre 1859 o 1861- y que murió en 1881, tras una fulgurante carrera delictiva, ha sido plasmada por la industria de Hollywood. Proveniente de una familia humilde empezó a delinquir cuando con 14 años se quedó huérfano. Primero fueron pequeños robos que le llevaron a pasar cortas estancias en la cárcel y luego se asoció con algunos conocidos delincuentes de la época. El sheriff Patt Garrett acabó con su vida en julio de 1881, después de que Billy -que había sido condenado a la horca-, se escapara de la cárcel del condado de Lincoln y en su fuga asesinara a dos agentes de la ley.