«La Bola de Cristal» regresa para celebrar sus 25 años

Efe

GENTE

La web de TVE conmemora el aniversario del programa infantil con un especial que incluye vídeos, cortes musicales, entrevistas y fotos del programa.

30 nov 2009 . Actualizado a las 21:27 h.

La Bola de Cristal marcó un antes y un después en la forma de hacer televisión infantil en España, y por eso ha quedado en la memoria colectiva de una generación que descubrió a través de este programa, que ahora celebra 25 años, a artistas como Alaska, Santiago Auserón, Anabel Alonso o Pedro Reyes.

La mención de personajes como Los electroduendes o la Bruja Avería, retrotraerán a muchos de los que fueron niños en los años 80 del siglo pasado.

Pero también a adultos, porque La Bola de cristal se convirtió en aquellos años de la transición en un «un oasis en el desierto», como recuerda su creadora, Lolo Rico, en la web de TVE, donde se han colgado vídeos, cortes musicales, entrevistas y fotos del programa.

«Cada uno encontró su propio hueco en el programa (...) Las maneras de mirar la vida, las imágenes, a los otros; el poder escuchar todas las músicas, las voces, las opiniones... todo tenía cabida en aquel crisol de ideas», explica Lolo Rico en su texto.

La web de la televisión pública ofrece asimismo los testimonios de algunas de las hoy estrellas del mundo de la televisión y el espectáculo que se iniciaron en La Bola de Cristal, como Alaska, Javier Gurruchaga, Santiago Auserón, Loquillo, Pablo Carbonell, Pedro Reyes, Miguel Ángel Valero, Anabel Alonso o Enrique San Francisco.

Las secciones emblemáticas del programa, cada una de las cuales llegó a tener su propio público, infantil, adolescente o adulto, fueron Los electroduendes, El librovisor, y La cuarta parte, dedicada a vídeos musicales y actuaciones de grupos de la movida madrileña.

La Bola de cristal consiguió dos TP de Oro al mejor programa infantil y se mantuvo en antena dos horas semanales durante cuatro años (1984-1988), un tiempo en el que Rico confió en «hacer un programa para que las mentes de sus espectadores se mantuvieran activas y aprendiera a crear jugando mientras cultivaban su sentido crítico de la realidad».