Estafan 2.000 euros a una coruñesa en un ritual esotérico ofrecido en un tarot telefónico

EFE

GENTE

La arrestada en Málaga es una mujer de 37 años, administradora única, gerente y socia de una empresa de ocio de servicios de tarot y sexuales por teléfono con tarifa especial.

18 jun 2009 . Actualizado a las 16:37 h.

Una mujer de A Coruña denunció haber sido estafada con 2.000 euros por un ritual esotérico ofrecido gratuitamente desde un servicio telefónico de videncia de tarifación especial de una empresa de Málaga, cuya administradora única ha sido detenida por la policía como autora de delitos de estafa.

La mujer que echó las cartas a la denunciante le indicó que le podía realizar un ritual esotérico gratuito, para lo cual tendría que llamar a intervalos de treinta minutos a este servicio y seguir las indicaciones que le darían sin tener que preocuparse del coste porque le «codificaban» las llamadas.

El ritual duró cinco días y le ocasionó el perjuicio de 2.000 euros, según ha informado hoy la Comisaría Provincial del Cuerpo Nacional de Policía.

La normativa de empresas de telecomunicaciones pone límites a las llamadas de tarifa especial (que tienen un precio elevado) y al principio un operador o una locución debe informar al consumidor del precio de cada minuto y la llamada no durará más de media hora, ya que pasado ese tiempo se interrumpe.

En el caso de empresas estafadoras como la investigada, ante una persona especialmente vulnerable respecto a ciertos temas no dudan en engañarla para mantenerla el máximo tiempo al teléfono, incluso amenazan a la víctima con que si cuelga sufrirá las más graves y misteriosas desgracias, y la instan a llamar una y otra vez cada vez que la llamada se corta transcurrido el tope de conexión.

También informan a las víctimas de que no facturarán todas las llamadas, ya que se las codificarán para que les salgan gratis, lo que finalmente no ocurre.

La arrestada en Málaga es una mujer de 37 años, administradora única, gerente y socia de una empresa de ocio de servicios de tarot y sexuales por teléfono con tarifa especial.

Los autores intelectuales de la estafa montaron una empresa, contrataron un número indeterminado de trabajadores como tele-operadores con pocos escrúpulos para engañar, contrataron un número de teléfono de tarificación especial y publicaron anuncios en periódicos locales de España donde ofrecían servicios de tarot, rituales esotéricos, de mal de ojo o sexuales, entre otros.

Los investigadores comprobaron que el teléfono incluido en los anuncios estaba adjudicado a una empresa de ocio con domicilio social en Málaga, cuya administradora se lucraba con el beneficio generado por la actividad ilícita.