La última en llegar, ayer, ha sido la Infanta Elena junto a su esposo, Jaime de Marichalar, y sus hijos, Juan Felipe Froilán y Victoria Federica.
03 ago 2007 . Actualizado a las 19:27 h.La Familia Real al completo se encuentra ya reunida en el Palacio de Marivent de Palma de Mallorca, donde pasan estos días de verano.
La última en llegar, ayer, ha sido la Infanta Elena junto a su esposo, Jaime de Marichalar, y sus hijos, Juan Felipe Froilán y Victoria Federica.
La hija primogénita de Don Juan Carlos y Doña Sofía no ha esperado para embarcar en el velero «Siemmens» que participa en la 26 Copa del Rey de Vela que, hasta mañana, se celebra en aguas de la bahía de Palma.
Los fuertes vientos del nordeste, que alcanzaron esta mañana los 18 nudos de intensidad, y el mar revuelto no amilanaron a la Infanta, que se embarcó en el citado velero que ha conseguido ocupar uno de los primeros puestos en la clasificación general de las regatas.
Doña Elena llegó antes del mediodía al muelle de Golondrinas junto a los Reyes.
La Reina, con vaqueros y polo rojo de la Copa del Rey de Vela, se acercó al pantalán para despedir con un beso en la mejilla a Don Juan Carlos, quien embarcó en el «Bribón», barco que dirige como patrón y que se sitúa en la tercera posición de la general.
En el velero contiguo al «Bribón», el «CAM», estaba ya embarcado el Príncipe de Asturias, el primero en llegar al muelle. Al otro lado del barco del Rey, estaba el Fram VI, con el rey Harald de Noruega a bordo.
Tanto Don Juan Carlos como el Príncipe, antes de subir a sus veleros, saludaron y departieron con el golfista Severiano Ballesteros, invitado en el «Taus», patroneado por Javier Banderas, hermano del actor Antonio Banderas.
Ballesteros, que es la primera vez que asiste a la Copa del Rey de Vela, comentó que iba «más bien a mirar, más que a participar» en la regata, ya que es «mucha responsabilidad». Junto a él también estuvo invitado en el mismo velero el ciclista Melchor Mauri.
En alta mar, los barcos que compiten en la cuarta jornada de la Copa del Rey alcanzaban gran velocidad gracias al viento que, sin embargo, provocó que, hasta primera hora de la tarde, el yate «Fortuna» estuviera amarrado y no saliera a navegar con los miembros de la Familia Real.
Los primeros en llegar a Palma, el pasado 18 de julio, fueron los Reyes para pasar unos días en los que combinan la agenda de trabajo con el descanso y las actividades deportivas.
Los Príncipes de Asturias, con sus hijas las infantas Leonor y Sofía, aterrizaron en la isla el pasado 27 de julio, el mismo día que los Duques de Palma con sus cuatro hijos.
La llegada ayer a Mallorca de la Infanta Elena y su familia permite ya organizar, previsiblemente para el próximo lunes, el tradicional posado de la Familia Real ante los medios de comunicación en el Palacio de Marivent. Una imagen ya tradicional del verano.