Navajas a la plancha, a la brasa y en salsa marinera: tres ideas para variar tus recetas
Estos tres restaurantes gallegos nos proponen probar distintas recetas con las navajas. Un molusco muy versátil y que aporta un gran sabor a mar. Tanto en las recetas como en la copa, incorporamos los vinos de Bodegas Marqués de Vizhoja, una apuesta segura para aprovechar el sabor de la navaja.
La navaja es uno de los productos clave en la gastronomía gallega. Este molusco, que proviene en gran parte de nuestras costas, se consume tradicionalmente a la plancha. Sin embargo, su sabor a mar y su textura jugosa se pueden aprovechar en muchas otras preparaciones.
Recorremos tres establecimientos gallegos para probar sus navajas: desde recetas a la plancha, pasando por la brasa y la salsa marinera. A su lado, los vinos de Bodegas Marqués de Vizhoja, con su carácter afrutado y fresco nos permitirán aprovechar el sabor a mar de la navaja.
Navajas a la marinera
Eira Vella, en Ponteareas, es una vinoteca de las de toda la vida. «O primordial é o producto. Este é un espazo de ocio e desfrute da gastronomía, non temos música nin televisión e tampouco wifi», explica Herman Pazos, al frente de este establecimiento, donde lo acompañan Consuelo González y Karina Domínguez.
Nos proponen unas navajas a la marinera, «comezamos cunhas cebolas a fritir, ás que engadimos o viño», explica el hostelero. En la preparación, utilizan el vino Torre la Moreira (100% albariño, D.O. Rías Baixas) de Bodegas Marqués de Vizhoja: «Non podemos botar calquera viño cando cociñamos. Neste caso, é un viño que reduce ben e que se mantén agradable para esta elaboración».
A la salsa marinera le añaden un toque de pimentón y, tras espesarla, «engadimos as navallas». Apenas las dejan cocinar unos pocos minutos, «e empratamos engadindo un pouco de salsa». A su lado, colocan una copa de vino del albariño Torre la Moreira, «marida perfectamente, porque na salsa tamén está incorporado, ademais o frescor deste viño rebaixa na boca ese punto máis forte da salsa».
La salsa marinera es una opción distinta de preparar un plato que habitualmente se cocina a la plancha. «Hai que ter coidado de non deixar que a navalla se guise moito, como fariamos cunha ameixa, porque entón perderá textura», explica Herman, quien insiste en que las navajas dan mucho juego en otras preparaciones, «sempre aportan o toque de sabor a mar».
Navajas a la plancha
En el restaurante Albatros es difícil atender al plato y a las vistas al mismo tiempo. Este local, inaugurado hace 12 años, es un increíble mirador sobre la ría de Vigo, al estar ubicado dentro de la estación marítima.
Con el mar a los pies, los productos como pescados y mariscos son claves en su carta. «Nos vamos adaptando a lo que demanda a la gente, pero siempre primando el producto de temporada y de proximidad», explica Carlos González, gerente del local.
En este caso, desde el mercado de Cangas, llegan las navajas que se sirven en el Albatros. «Las elaboramos de forma tradicional, a la plancha con un toque de ralladura de limón y aceite», señala Carlos.
Esta receta, la más tradicional, «permite apreciar su mayor sabor a mar». Junto a las navajas, nos sirven una copa de Señor da folla verde (Condado do Tea, 70% albariño, 15% loureira, 15% treixadura; D.O. Rías Baixas) de Bodegas Marqués de Vizhoja. Gracias a la mezcla de uvas, este vino no es tan ácido como otros con uva albariño, lo que permite disfrutar más de las navajas cuando se hacen a la plancha, sin otros sabores adicionales.
Navajas a la brasa
La Marisquería Ríos, justo en el punto limítrofe entre A Coruña y Culleredo, acumula 59 años de experiencia despachando mariscos y otros productos del mar. José Ríos está al frente de este negocio familiar, que inauguraron sus padres, y donde prima la calidad del producto.
La navaja forma parte de la carta de esta marisquería, «las servimos a la brasa, que le da un aroma a parrilla muy especial». El plato se termina «con una salsa que elaboramos con cítricos, aceite, ajo y el vino Torre La Moreira, de Bodegas Marqués de Vizhoja».
La salsa recuerda a una versión evolucionada de añadirle un toque de limón. Para el hostelero es clave utilizar un buen vino para cocinar la salsa, «si compras un producto, como unas navajas que tienen un precio considerable, ¿lo vas a desperdiciar añadiendo un vino que no está a la altura? Tienes que buscar algunas características en el vino con el que cocinas, en este caso el sabor afrutado».
Junto a estas navajas y su salsa, en la Marisquería Ríos nos sirven una copa del vino Torre la Moreira (100% albariño, D.O. Rías Baixas). «Igual que en la salsa, el vino tiene un carácter afrutado que encaja perfectamente. Permite saborear la navaja, pero a la vez disfrutar del vino, no se empaña ningún sabor», concluye.