Casa Labra, Badulaque o el Filandón: estos restaurantes han marcado la historia de la política española
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El PSOE se fundó en una taberna de Madrid. Rajoy pasó ocho horas en el restaurante Arahy el día que se dirimía su futuro al frente del país y, en Casa Lucio, se inmortalizó un momento histórico con cuatro expresidentes homenajeando al rey emérito
18 oct 2022 . Actualizado a las 17:48 h.«Si la política divide a los hombres, la buena mesa los reúne». El autor de esta declaración, Guillaume Gómez, lleva veinte años sirviendo a los ocupantes del Palacio del Elíseo. Jacques Chirac, François Hollande, Nicolas Sarkozy y Emmanuel Macron. Tiempo ha tenido este chef para percatarse de la importancia de un ágape en lo que a menesteres políticos se refiere, consiguiendo con un buen menú que cuestiones de calado se resuelvan sino de manera más civilizada, sí más deliciosa. Apliquemos esta máxima a nuestro país: lugar de peregrinaje por su excelente gastronomía y que tiene más bares por habitante que camas de hospital. Efectivamente, la hostelería ha jugado y juega un papel fundamental en la historia reciente de España, pues mantel mediante se han dado apretones de manos que, en buena medida, influyen en la radiografía económica y social que vivimos hoy.
Para muestra, el botón que es la fundación del PSOE, en 1789 en el madrileño Casa Labra, un restaurante (evidentemente) castizo que ahora es más conocido por sus pinchos de bacalao que por haber asistido al nacimiento del partido que hoy gobierna en coalición con Unidas Podemos. Situado en la muy céntrica calle Tetuán, no fue el lugar elegido para celebrar ayer lunes el 40 aniversario de la victoria de Felipe González. Sin embargo, este local sigue recibiendo a diario caras conocidas, como es el caso de Iker Casillas.
El mundo del celuloide y de la política se encontraba de bruces en el extinto Zalacaín. Situado también en la capital, tuvo que cerrar hace dos años tras no poder superar los duros meses de pandemia, dejando un vacío entre los que gustan de restaurantes con lustre, solera y esplendor.
Como lo poco gusta y lo mucho cansa, quienes frecuentaban este local también han pasado infinidad de sobremesas en Casa Lucio, un emblema por sus famosos huevos fritos que no han dudado en probar la flor y nata del panorama social patrio. En particular, el menú de Lucio embelesa al rey Juan Carlos. Por eso antes de pasar a ser emérito y de alcanzar cotas insospechadas de animadversión, el entonces presidente del Gobierno, Mariano Rajoy y sus predecesores en el cargo (sin los entonces ya fallecidos Adolfo Suárez y Calvo Sotelo) homenajearon en este local al monarca en una reunión que fue calificada como «informal y privada».
De informal y, sobre todo, inquietante, se podría tildar la estancia de ocho horas de Mariano Rajoy en el restaurante Arahy, próximo al Congreso de los Diputados, el día que en la Cámara Baja se decidía su futuro. Mientras Pedro Sánchez presentaba una moción de censura contra el entonces líder del Ejecutivo, este compartía salmorejo, solomillo y alguna botella de whisky con su equipo, asumiendo que la situación se iba torciendo sin remedio. Aunque este fue el menú degustado, lo cierto es que el Arahy es famoso por sus platos de pescado, entre los que destacan el atún, las vieiras y la merluza.
Antes de la debacle, Rajoy solía disfrutar de comidas de trabajo en el Filandón, ubicado en la carretera Fuencarral-El Pardo. Y también después, pues fue el lugar elegido para la comida de despedida con los entonces ministros. Por recomendación del expresidente, o no, lo cierto es que Barack Obama acudió a este restaurante un mes después junto a su mujer Michelle Obama. Acudieron a la cita con el embajador James Costos y su marido Michael Smith. Este local especializado en platos a la parrilla destaca por su elegante terraza y por sus exclusivas piezas de carne.
Que Galicia es un paraíso culinario lo saben los más altos cargos del país. Por eso en Cedeira, el restaurante Badulaque reúne con frecuencia a mandatarios y exmandatarios (Mariano Rajoy, Feijoo) del Partido Popular con el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez. Situado en pleno puerto, se trata del lugar idóneo para disfrutar de los mejores percebes, aunque si hay un plato que recomiendan quienes han visitado Badulaque es el salpicón de langosta.
En O Salnés se ha puesto las botas el rey emérito, que no le hace un feo a un vanguardista Culler de Pau (O Grove), pero tampoco a los inevitables templos del marisco: D'Berto (O Grove), donde ha compartido mesa en alguna ocasión con el presidente de Abanca, Juan Carlos Escotet, y Rocamar, una marisquería de Baiona que también hace las delicias de Julio Iglesias.
