El turismo remonta tras un julio irregular con casi un 40 % de visitantes extranjeros
GALICIA
La Xunta y el sector confían en que el final de la temporada estival impulse otro año de récord
20 ago 2024 . Actualizado a las 05:00 h.«En julio salvamos los trastos. Después de 18 días de lluvia, los últimos 12 fueron francamente buenos, y en este puente en muchos sitios han estado por encima del 90 % de ocupación», dice Cesáreo Pardal, presidente del Clúster de Turismo de Galicia. A falta de los datos definitivos, todo indica que julio fue un mes irregular, ya que hubo algunas subidas, señala Xosé Merelles, director xeral de Turismo de Galicia. Su valoración general es positiva, a la vista de un agosto «excepcional», que apuntala la posibilidad de otro año de récord, y de los distintos datos que corroboran los avances para desestacionalizar y distribuir por más zonas de Galicia el turismo y sus beneficios económicos.
El presidente del clúster explica que la ocupación en la primera quincena de julio se situó por debajo del 70 %. Pero ese porcentaje creció en la segunda mitad del mes y las reservas de última hora crecieron un 15 %. Esa mejora sería coherente con los datos de la primera mitad del año, ya corroborados por el INE, que indicaban un aumento de la ocupación hotelera superior al 2 %, señala Merelles. El director xeral añade que hubo incrementos de más del 5 % en temporada media y de más del 12,5 % en la baja. De ahí que destaque una progresiva desestacionalización, que se está produciendo de forma sostenida en el tiempo y que también se refleja en el número de peregrinos que van a Santiago.
Ese mismo proceso se está dando en lo geográfico. En el primer semestre, las zonas que registraron un mayor crecimiento de viajeros fueron Ferrol, Costa da Morte y el interior, incluyendo Lugo y Ourense y su provincia.
El creciente flujo de visitantes a la ciudad de As Burgas está ligado a la mejora de las conexiones ferroviarias. Cesáreo Pardal considera que aún es posible mejorar mucho en ese campo. «Hay una clara insuficiencia de conexiones y de vuelos internacionales», insiste. El presidente del Clúster de Turismo reconoce que el trabajo de las Administraciones en materia de promoción es «muy bueno», pero queda desaprovechado por la falta de enlaces ferroviarios y aéreos. Esa limitación afecta en especial a los viajeros de otros países, y «la mayoría» llegan a través de Oporto.
Esas dificultades limitaban en el pasado la cifra de visitantes internacionales a cerca del 12 %. Aunque coincide en que es posible llegar a más, Xosé Merelles señala que el porcentaje durante el primer semestre del año se situó en el 38 %. Añade que los turistas extranjeros gastan una media de 170 euros por día, lo que les convierte en un mercado con «buenas perspectivas» para continuar trabajando.
Merelles insiste en que el crecimiento se está produciendo de forma «racional» e insiste en que Galicia no sufre de masificación turística. Advierte que las campañas contra viajeros de determinados puntos de España o los visitantes en general pueden hacer un «gran daño» al sector turístico y hotelero, que es «muy sensible» a las opiniones. Destaca además en que no son una postura compartida por la mayoría de los gallegos. La última encuesta de actitud hacia el turismo, realizada en diciembre del 2023, revelaba una receptividad media de casi ocho puntos sobre diez, algo menos que el año previo.
También Pardal considera «negativas» esas campañas que tienen a «un enfrentamiento entre la población y los turistas». Afirma que la meta debe ser fomentar un turismo «sostenible, que se integre y conviva», y recuerda la importancia del sector para lugares como Santiago o Sanxenxo.
Los ingresos hoteleros ya superan los 160 millones
Los hoteles gallegos tuvieron unos ingresos totales nominales de 405 millones de euros el año pasado tras crecer un 6,7 %. Pero este año el aumento es incluso mayor, de un 8,7 % en el primer semestre, cuando se rozaron los 158 millones, señala Xosé Merelles.
El director xeral de Turismo del Gobierno gallego considera esa cifra otro indicio de la buena marcha del sector. Señal también el crecimiento sostenido del IPC turístico desde el 2022. Esa tendencia supone que los precios son más altos, pero tiene una vertiente positiva porque confirma que la demanda, además de estar mejor distribuida en el tiempo y en la geografía gallega, también crece.
La mejora del rendimiento de los hoteles no es incompatible con el crecimiento del Camino de Santiago. Entre enero y julio de este año se registraron 142.871 noches en esos establecimientos, un 2,2 % más que en el mismo período del año pasado. La desestacionalización también afecta a los albergues, porque en julio se hicieron 31.337 noches, un 5,2 % menos que en el 2023. Es decir, el aumento se dio en meses de menos peso turístico.
Esa tendencia viene de atrás, hace una década se hicieron 52.702 noches en julio. La bajada desde entonces ha sido continua, aunque el número de peregrinos a lo largo del año crece.
Otro sector al alza es el de los cruceros. En junio llegaron a Galicia 75.603 viajeros en esos barcos, cuando en el mismo mes del 2023 se contaron 69.380. La diferencia es aún más notable si se atiende al dato acumulado desde enero. En este ejercicio se rozaron los 253.000 visitantes, cuando en los mismos meses del 2023 no se llegó a los 210.600. Ambas cifras están muy por encima de la del 2022, cuando no se llegaba a los 143.200 cruceristas.