
La Xunta lo situará entre un 2 y un 3 % por encima de los 13.256 millones
16 jul 2024 . Actualizado a las 23:52 h.El techo de gasto no financiero de Galicia para el 2025 se situará entre un 2 % y un 3 % por encima de los 13.256 millones de euros, el límite establecido para este año. Se trata de una cifra récord, la más alta de la serie, que arranca en el 2012, año en el que la Xunta fijó por ley este tope y se convirtió en la primera comunidad en dar este paso para garantizar la estabilidad en las cuentas públicas. El dato lo avanzó este martes el conselleiro de Facenda, Miguel Corgos, en una comparecencia marcada por la resaca del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) del lunes, que volvió a evidenciar el pulso de buena parte de las comunidades con el Estado por las negociaciones abiertas para mejorar la financiación catalana.
En dicho encuentro, la ministra María Jesús Montero no concretó a las autonomías cuál serán las entregas a cuenta para Galicia en el 2025, dato indispensable para avanzar en el diseño del presupuesto gallego y para fijar su techo. Previsiblemente, lo hará los próximos días, y será entonces cuando Facenda lleve la cifra para que dé luz ver el Consello de la Xunta y sea posteriormente refrendada por el Parlamento gallego, tal y como establece el marco normativo vigente.
Miguel Corgos garantizó que los presupuestos del 2025 permitirán cumplir con los retos que demandan los ciudadanos, a pesar de la «decepción» por el resultado del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF). Según explicó el responsable de Facenda, hay una falta de certezas para establecer los planes financieros de las comunidades. «Para nós era moi importante contar cunha folla de ruta de como ían evolucionar as finanzas públicas para ver, á súa vez, como van evolucionar as grandes políticas de gasto que xestionamos as comunidades», precisó Corgos, que puso el énfasis en la importancia de blindar la senda de crecimiento para desarrollar las políticas que son competencias de las comunidades.
Retrasos
En esta misma línea, el conselleiro lamentó que la ministra de Hacienda y Función Pública confirmase que las entregas a cuenta para este año no se pagarán hasta el mes de septiembre, lo que hará que la comunidad siga con el desfase que tiene entre ingresos y gastos este año. Un desequilibrio que, según precisó, se agrandará este mes de julio, con la actualización de las retribuciones de los empleados públicos.
Al igual que este mismo lunes a la salida de la reunión del CPFF, Corgos volvió a mostrar su disconformidad con el objetivo de déficit, el 0,1 % del PIB en el 2025, lo que supone dos décimas de margen fiscal respecto a la anterior senda, y lo que revela, a su juicio, un reparto desigual entre el Estado y las comunidades. Lo mismo sostuvo respecto a la deuda. Según los datos aportados por Facenda, la Administración central se reserva un 94 % de la capacidad de endeudamiento y las comunidades solo un 4 %. La Xunta también advierte de que el Gobierno central no ha explicado cómo afectarán las nuevas reglas fiscales europeas que obligan de forma distinta a los países miembros.
Sin embargo, uno de los elementos de mayor preocupación para Galicia está en la ausencia de pasos para avanzar en un nuevo modelo de financiación autonómica, una negociación condicionada por las demandas del nacionalismo catalán, que exige un trato singular.
Compensar el sobrecoste
Al igual que el lunes, Corgos lamentó que no se haya progresado en la reforma del sistema de financiación autonómica. Un modelo, dijo, superado por la antigüedad, que no se hace a las nuevas circunstancias que rigen a la economía hoy y que cada vez acerca menos recursos de los que precisan las comunidades. Galicia demanda un mejor trato por el sobrecoste que suponen el envejecimiento y la dispersión. Para el responsable de Facenda es necesario que se revise el modelo teniendo en cuenta a los ayuntamientos, de forma que se dé respuestas a sus necesidades.
Las comunidades piden crear un grupo de trabajo para avanzar en la financiación
El consejero de Economía, Hacienda y Fondos Europeos del Gobierno de Cantabria, el popular Luis Ángel Agüeros, desveló que las comunidades pidieron al Gobierno en el Consejo de Política Fiscal y Financiera crear un grupo de trabajo para empezar a negociar la reforma del sistema de financiación autonómica. En este sentido, sostuvo que el criterio de población «no satisface a nadie salvo a las grandes».
El secretario general del PSOE de Aragón, Javier Lambán, advirtió este martes de que «el precio de ERC para investir a Salvador Illa (PSC) será muy alto porque, o se les entrega la llave de la caja de impuestos en su totalidad o Illa lo va a tener muy complicado». Lambán se opone a «cualquier tipo de financiación diferenciada» y consideró que la financiación diferenciada para Cataluña significa «romper el concepto de cohesión del territorio sobre el que se basas la idea de España emanada de la Constitución española y va contra la idea de igualdad que tiene que defender un socialista».
El Gobierno de Castilla La Mancha, presidido por el socialista Emiliano García Page, también ha mostrado su preocupación por la parálisis en la encuentra la revisión del modelo de financiación autonómica, un temor que se comparte también desde el Gobierno de La Rioja, del PP. Su consejero de Hacienda, Alfonso Domínguez, lamentó que solo se estén produciendo avances con Cataluña al hablar de una financiación singular que conlleva privilegios para una parte del territorio.