La cámaras antiincendios aumentan su radio de vigilancia y cubrirán este año el 85 % del territorio de alto riesgo

Mario Beramendi Álvarez
MARIO BERAMENDI SANTIAGO

GALICIA

O Courel se vio afectado por graves incendios en el mes de julio del 2022
O Courel se vio afectado por graves incendios en el mes de julio del 2022 ALBERTO LÓPEZ

La Xunta da luz verde al plan de prevención y extinción del 2024, que aumenta a siete meses el tiempo de trabajo de una parte personal laboral

28 may 2024 . Actualizado a las 20:39 h.

La Xunta ha dado luz verde esta mañana al Plan de prevención e defensa contra os incendios forestais de Galicia (Pladiga) que se aplicará en este 2024 y que incluye como una de sus principales novedades un aumento de la cobertura de videovigilancia en las zonas de mayor riesgo. El número de cámaras instaladas pasará a 177, con 24 nuevas unidades instaladas en doce localizaciones, lo que permitirá supervisar el 85 % del territorio más expuesto a la actividad incendiaria. A la hora de establecer la ubicación concreta de las unidades se ha tenido en cuenta que proporcionen imágenes de las áreas que vienen registrando más fuegos en los últimos años, con una especial atención a las Parroquias de Alta Actividade Incendiaria y a las Zonas de Alto Risco de incendios (ZAR). Gracias a esta tecnología, en caso de detectarse un incendio, no solo es posible su visualización en tiempo real, sino hacer también un seguimiento que proporciona información clave para los equipos de extinción. 

El nuevo Pladiga, tal y como ha informado el presidente Alfonso Rueda, incorpora mejoras en el personal, con la aplicación efectiva del aumento del tiempo de trabajo de una parte del personal laboral, pasando a trabajar siete meses en esta anualidad, ocho meses en el 2025 y nueve meses en el 2026. Hay que tener en cuenta que dos tercios de este personal ya trabaja a lo largo de 12 meses. Así, el operativo estará integrado en total por más de 7.000 personas, contabilizando tanto los profesionales propios de la Xunta como los adscritos a otras administraciones. Un conjunto de medios humanos similar al de otras campañas.

Medios materiales

Este año se incorporan seis nuevas máquinas hidrostáticas polivalentes. Se trata de unidades autopropulsadas que permiten realizar tanto trabajos preventivos de desbroce (incorporan un brazo lateral con disco de corte) como de extinción, puesto que disponen de un espacio para depósito de agua, con una lanza y enganches para mangueras y soplador de aire para limpieza de calzadas y zanjas. Galicia contará un año más con una treintena de medios aéreos contra el fuego -entre los de la Xunta y los que aporta el Estado- y en tierra habrá cerca de 380 motobombas (incluidas las que aportan los concellos), de las que 18 son nuevas. Una de las novedades este año es la entrada en funcionamiento de la base de medios aéreos de Verín-Oímbra o la construcción de 44 nuevos puntos de agua, así como el mantenimiento de los 4.843 puntos existentes, que son lo que prestan servicio a los medios aéreos y terrestres del Servicio de Prevención y Defensa contra incendios forestales (SPIF).

Otro avance tecnológico es la instalación de móviles, tabletas y la aplicación Xeocode Lite (de gestión de la información sobre fuegos) en las motobombas del SPIF, lo que, según la Xunta, mejorará su operatividad y permitirá, entre otras utilidades, facilitar datos sobre el posicionamiento, en tiempo real, de los medios disponibles. 

Otros contenidos del Pladiga se refiere, por ejemplo, a la determinación de las Parroquias de Alta Actividad Incendiaria (PAAI), que son aquellas incluidas en zonas declaradas como de alto riesgo que, por el número de incendios forestales reiterados o por su gran virulencia, precisen de medidas extraordinarias de prevención y de protección de los montes frente los fuegos. Su número total es de 40 y no varía respecto al dato de 2023. El cambio es que se incorporan al listado tres parroquias y caen otras tres. Las que salen del listado son las de Santa Uxía de Ribeira (Ribeira), Requesón (Chandrexa de Queixa) y Parada de la Serra (A Gudiña). Entran en el listado las de Santa Baia de Boiro (Boiro), Sano Millao (Cualedro) y Santigoso (A Mezquita)

En relación con los objetivos de control, que se calculan a raíz de los valores medios de los últimos 10 años, se establecen, entre otros, los de que la superficie quemada total y por fuego estén por debajo de la media del último decenio. También, que los fuegos de más de 25 hectáreas estén por debajo del 2 % del total y que aquellos inferiores a 1 hectárea estén por encima del 70 % del total de registros. Sobre el plan preventivo, que se integra en el Pladiga, la Xunta destaca que supondrá actuar en más de 60.000 hectáreas y en cerca de 5.400 kilómetros de vías, con un presupuesto que supera los 41 millones de euros.

Otro de los planes que forman parte del Pladiga es el relativo a la formación. En este capítulo se incluyen hasta 37 cursos en 553 ediciones, con más de 14.000 plazas, lo que supondrá superar las 150.000 horas de formación. Además, en el apartado de concienciación ciudadana, se prevén cuando menos 40 charlas dirigidas a la población de las parroquias de alto riesgo.