La ministra de Sanidad apuesta por comenzar reduciendo las guardias médicas de 24 a 17 horas

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Pretende realizar las modificaciones necesarias antes de que acabe el año y que la medida no tenga efecto en las retribuciones

20 mar 2024 . Actualizado a las 18:13 h.

Lo había anunciado y volvió a reiterarlo. La ministra de Sanidad, Mónica García, insistió este miércoles en su compromiso de abolir las guardias médicas de 24 horas sin que ello se traduzca en una disminución de las retribuciones del personal, y para poner en marcha esta medida apuesta por reducirlas progresivamente, comenzando por fijar máximos de 17 horas. El anuncio lo realizó en declaraciones a los medios, recogidas por Efe, tras mantener una reunión con la médica intensivista Tamara Contreras, quien el mes pasado inició una recogida de firmas para acabar con las guardias de 24 horas por los riesgos que suponen para profesionales y pacientes.

La ministra reconoce que es una medida compleja que exige una reestructuración del Sistema Nacional de Salud, para lo que es necesario modificar el Estatuto marco, algo que su departamento está «plenamente comprometido» a hacer antes de que acabe este año. Además, necesita del consenso con sindicatos, comunidades y demás actores implicados.

Mónica García está convencida de que es ahora cuando se pueden hacer las reformas legislativas necesarias, pero hay que dar cierta flexibilidad para que este cambio estructural se vaya dando poco a poco. Por eso, como paso intermedio antes del fin de las guardias de 24 horas, la ministra cree oportuno establecer jornadas de un máximo de 17 horas sin que ello incida de manera negativa en las retribuciones del personal. «Lo que queremos es que trabajen bien, que ningún paciente sea el paciente al que se le atiende en la hora 23, y que disminuyan los errores médicos que se producen por el cansancio de los profesionales. Nos vamos a poner manos a la obra», recalcó.

La responsable de Sanidad asume que el cambio de este modelo de guardias, vigente desde los últimos 50 años, va a ser complicado, porque hay «ciertas resistencias». «Las horas de guardia no computan como hora trabajada, cuando contamos esto fuera la gente no da crédito. Es un anacronismo que tenemos que empezar a cambiar. Y la senda es el diálogo y sobre todo la evidencia científica, pero hay que iniciar el camino poco a poco en consenso con el resto de los actores», dijo.

Por su parte, Tamara Contreras salió de ese encuentro con la ministra «gratamente satisfecha». La médica destacó el compromiso de modificar el Estatuto para final de año, «que en el 2025 acabemos con este tema de las horas complementarias, que son las horas de guardia obligatoria y que no computan». Al igual que la ministra, Contreras también cree que «no va a ser fácil», así que pide a todos sus compañeros que se unan para impulsar una medida encaminada a mejorar su situación y la de los pacientes.

Contreras ya ha reunido casi 115.000 firmas desde que puso en marcha su campaña a principios de febrero. Valoró la reducción inicial a 17 horas que contempla Sanidad por ser «un gran paso». «No podemos pasar del todo al nada ni pasar de 24 horas a 12 sin caminos intermedios», reconoció.