Estas son las fases que aún debe superar el tren Avril para circular por las vías gallegas

Pablo González
pablo gonzález REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

Cabina de conducción del tren Avril
Cabina de conducción del tren Avril Talgo

Talgo prevé finalizar las pruebas de homologación en las próximas semanas, pero después deberá obtener la autorización oficial y verificar las 30 unidades

10 ene 2023 . Actualizado a las 05:10 h.

Los trenes Avril de ancho variable que espera Galicia para recortar los tiempos de viaje de las ciudades del eje atlántico no llegaron el verano pasado, como estaba previsto inicialmente, lo que motivó una agria polémica entre Renfe y Talgo, con acusaciones cruzadas e incluso amenazas de llevar el caso a los tribunales por incumplimiento de contrato. Después, las previsiones que manejaba el Ministerio de Transportes fijaban la entrega en el primer cuatrimestre de este año, para que pudieran entrar en servicio en primavera. Ahora hay un nuevo retraso y el plazo que se maneja es el verano o incluso principios del otoño. En cualquier caso, los trenes de muy alta velocidad y gran capacidad de la serie 106 aún tienen que pasar por una serie de fases para que puedan circular por las vías gallegas.

Fase de pruebas

Resultado satisfactorio de la homologación. El proceso de homologación con pruebas en vías de los Avril de ancho variable está llegando a su fase final. «Estamos en las últimas pruebas de homologación, que terminarán en las próximas semanas», explican fuentes de Talgo. El proceso de homologación de las unidades de ancho variable —las que pueden circular por las vías de ancho internacional e ibérico— fue más simplificado que las de ancho fijo, pues hay componentes comunes que ya fueron verificados. En cualquier caso, el proceso durará un año, pues las pruebas comenzaron a finales de febrero del 2022 por vías de diferentes características de toda España. «Se trata de pruebas complejas y exigentes que deben ser superadas con garantías. Se avanza satisfactoriamente», explican fuentes del fabricante.

 

Fase administrativa

Supervisión del nuevo material rodante y autorización. La fase de pruebas genera un expediente que debe ser supervisado por la autoridad ferroviaria, en el caso de España la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria. Pero también será necesaria la supervisión de la Agencia Ferroviaria de la Unión Europea. Hay que recordar que Renfe tiene previsto destinar algunas de las unidades de la denominada serie 106 a competir con SNCF —la operadora pública de Francia— en la red ferroviaria francesa. La autorización para la puesta en servicio depende de estos organismos y no existen plazos claros sobre lo que duran estos procedimientos, pues a menudo se solicitan aclaraciones sobre distintos aspectos del material rodante. El pasado mes de septiembre un Avril de rodadura desplazable alcanzó los 360 por hora entre Ourense-Santiago, uno de los requisitos para poder homologar estos trenes a una velocidad máxima de 330, aunque por el momento su velocidad comercial no superará los 300, pues es el límite actual en la red española.

 Fase de verificación

Control de cada tren antes de la puesta en servicio. Una vez concluida la fase administrativa y obtenidos los permisos correspondientes comienzan las verificaciones de cada tren antes de su puesta en servicio. La homologación se realiza con varios convoyes, pero después hay que comprobar que las treinta unidades —quince de ancho fijo y otras quince de variable— están en perfecto estado para comenzar a circular. Tampoco existen plazos claros respecto a la duración de este proceso, pero es crucial para que Renfe reciba todos los trenes preparados para las operaciones comerciales. Una vez terminado este proceso se produciría la entrega formal a Renfe.

Fase de habilitación

Los maquinistas deben formarse en el nuevo material rodante. Una vez que Renfe ya cuenta con los trenes debe formar a los maquinistas en las particularidades del nuevo material rodante, de la misma forma que son habilitados para circular por líneas determinadas. Tampoco existen previsiones sobre lo que puede durar este proceso, pero es necesario habilitar surcos fuera de los horarios comerciales para que el personal de conducción se familiarice con los trenes de la serie 106.

Fase de puesta en servicio

Reparto de las unidades. En paralelo a la formación o en una fase posterior, Renfe diseña el reparto de las distintas unidades para las distintas líneas y los cuadros de servicio. En su momento, el presidente de Renfe, Isaías Táboas, aseguró en una visita a Galicia que se destinarían siete unidades a la comunidad. Alguna de ellas formaría parte de la marca de bajo coste Avlo.