La Xunta destinará 28 millones a mejorar sus paradas de bus, dos tercios de las 4.884 bajo su competencia están sin tejado o necesitan reemplazarlo
08 ene 2023 . Actualizado a las 05:00 h.La parada de bus desguazada merece un capítulo aparte en la extensa literatura sobre chapuzas y feísmo. Las hay sin indicadores, pintadas, rotas, sin paredes o sin techo. Otras están al borde mismo de la carretera, han brotado en el medio de una cuneta que se inunda al llover, o se han integrado en la maleza cual Tarzán.
A la variedad se suma la cantidad. Por su dispersión geográfica, en Galicia hay miles de paradas. En los núcleos más pequeños hacen incluso una función social, y se han convertido en puntos de encuentro a falta del bar de rigor. Pero es en la zonas rurales, con su población más envejecida, donde las marquesinas están más tronadas, y no protegen la salud de los paisanos frente a las inclemencias del tiempo y el ocasional desaprensivo al volante.
El estado de las paradas preocupa en la Xunta, que quiere impulsar el transporte público y sabe que algunas instalaciones espantan a los viajeros.
El Gobierno gallego elaboró este año dos documentos técnicos para poner remedio a los problemas. En mayo se publicó la Guía para o deseño de paradas de autobús na Rede Autonómica de Estradas de Galicia, en la que se describe un modelo estándar y detalles de construcción y mantenimiento. En julio, se conocieron las Recomendacións para os cruces de peóns nas inmediacións das paradas de autobús situadas no dominio público viario autonómico, que pretende mejorar la seguridad vial y de los peatones.
La semana pasada, la Consellería de Infraestructuras presentó un informe sobre las 4.884 paradas de autobús situadas en la red autonómica de carreteras. No son todas las de Galicia, ya que también hay paradas en vías municipales, provinciales y del Estado. Muchas de ellas también están pendientes de una reforma.
La perspectiva de género
El documento parte del análisis de 674 instalaciones, una «mostra moi representativa» para «identificar posibilidades de mellora». Aparecieron muchas opciones. El 67 % de las paradas o no tienen marquesina o está en tan mal estado que necesitan reemplazarla. La tipología de las marquesinas es «moi variada», alega el informe, que también confirma que suelen estar en mejor estado en las áreas urbanas e interurbanas.
El estudio también detectó que el 91 % de las paradas se podrían hacer más accesibles para personas con movilidad reducida o con otras discapacidades. Es preciso implantar información en Braille o con sistemas sonoros y también sistemas de guiado en el suelo. En muchas será necesario mejorar los accesos para acceder a ellas en silla de ruedas.
Otro aspecto analizado fue la seguridad, teniendo en cuenta la perspectiva de género. El estudio concluye que sería posible hacer mejoras en dos tercios de las instalaciones, sobre todo en las interurbanas, que suelen contar con menos iluminación y visibilidad. Muchas de ellas están además aisladas y «pola orografía, a vexetación, a sinuosidade da estrada e outros elementos presentan unha visibilidade non adecuada o que se traduce en problemas de seguridade de forma xeral e moi en particular en referencia ás mulleres».
Las mejoras previstas
El estudio no obvia las dificultades logísticas y económicas de intervenir en un número tan alto de instalaciones dispersas por toda la comunidad. Por esos motivos se decidió actuar primero en las paradas con mayor número de viajeros de las áreas metropolitanas o en las que estén fuera de ellas, pero que conecten con alguna de las siete grandes ciudades y también presenten mucha afluencia de pasajeros.
En total se seleccionaron 1.145 paradas, que se han distribuido en 22 proyectos de mejora. La previsión de la Xunta es que esos trabajos supongan un desembolso total de 28 millones de euros.
La cantidad es muy significativa, y se obtendrá a partir de los fondos europeos Next Generation e incluso de los Feder 2021-2027, ya que «o incremento de custos da obra pública e a limitación económica do MRR [Mecanismo de Recuperación e Resiliencia] achegado polo Estado ás comunidades autonómicas o fará necesario», señala el informe.
Es posible dedicar las ayudas de la UE a mejora esas instalaciones porque una de sus finalidades es reducir las emisiones contaminantes, a lo que contribuye el transporte público.
Las nuevas paradas tendrán un diseño homogéneo, basado en los dos documentos ya mencionados sobre el diseño de las instalaciones y los cruces en su entorno.
Siempre que sea posible, añade el documento, se instalará una marquesina para proteger a los usuarios de las inclemencias el tiempo. En los demás casos se optará por un poste señalizado con la información necesaria. Las nuevas marquesinas estarán cerradas por detrás, incluirán iluminación propia e información sobre los servicios adaptada a personas con discapacidad. También se retirarán los elementos que dificulten la visibilidad o posibiliten ocultarse en las inmediaciones, con el fin de mejorar la seguridad incluyendo el citado criterio de perspectiva de género.
El Gobierno gallego prevé licitar obras en 1.145 paradas durante el 2023
La previsión de la Consellería de Infraestruturas es licitar durante el año que viene los 22 proyecto de mejora en 1.145 paradas de toda la comunidad. Los proyectos se someterán en próximas semanas a exposición pública, ya que en muchos casos requieren la expropiación de terrenos. A finales de marzo, de cumplirse los plazos, estarán licitados los primeros diez proyectos con un presupuesto conjunto de 13,4 millones de euros. El resto de las obras se tramitarán en los meses siguientes, hasta alcanzar un total de 27,96 millones antes de que termine el 2023.
