El PSdeG apremia a Besteiro para que confirme su candidatura a la Xunta

Manuel Varela Fariña
Manuel Varela REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

Imagen de archivo de González Formoso y José Ramón Besteiro
Imagen de archivo de González Formoso y José Ramón Besteiro CESAR QUIAN

El secretario xeral lo señala como cabeza de cartel: «Terá todo o meu apoio»

28 dic 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Hace seis años que José Ramón Gómez Besteiro guarda silencio, un mutismo que es ensordecedor desde que hace una semana se conoció el sobreseimiento de la operación Pulpo, la última causa pendiente que tenía con la Justicia. La instrucción de la jueza Pilar de Lara lo marginó en el ostracismo, a un largo retiro autoimpuesto de donde el PSdeG lucha ahora por rescatarlo para devolverlo a la primera línea política. Esa es la posición hacia la que todos los dirigentes de la formación pretenden enviarlo, como expresaron cada día desde que saltó la noticia del archivo de su imputación, pero nunca habían definido cuál era ese puesto. Hasta ayer.

«Se Besteiro quere ser candidato á Xunta vai contar con todo o meu apoio», afirmó el secretario xeral socialista, Valentín González Formoso, durante un desayuno con la prensa en el Parlamento. Al antiguo líder socialista se le había elogiado hasta el punto de compararlo con los delanteros Messi, Mbappé y Haaland. «Debe volver a saltar ao terreo de xogo e en primeira liña, marcando goles», dijo el lunes José Manuel Lage, número dos del partido, en un símil futbolístico que recogió ayer Formoso, quien admitió no ser muy fan de esas comparaciones.

Lo que deja entrever el presidente de la Diputación de A Coruña, cargo que aseguró deber, en gran parte, a Besteiro, uno de sus «mellores amigos» y a quien debe «lealtad, lealtad y lealtad», es que él se siente más cómodo repartiendo juego, como lo hacían Iniesta, Xavi o Busquets detrás de Messi, que fajándose con los defensas rivales y anotando goles. Recordó, eso sí, que ya había anunciado su intención de ser candidato a la Presidencia de la Xunta, voluntad que mantiene por «coherencia», que en política lo es «todo» para él. Y se enmendó a sí mismo, avanzando que nunca se presentará como rival de Besteiro si este decide presentarse a las primarias que elegirán, tras las municipales, al futuro cabeza de cartel socialista para relevar a Alfonso Rueda al frente del Gobierno gallego. «En la vida», zanjó.

Otro que volvió a ensalzarlo ayer fue José Tomé, presidente de la Diputación de Lugo. Le definió como un «bo candidato para todo», en esa especie de carta a los Reyes Magos que el partido extiende a Besteiro para que escriba ahí a qué cargo quiere optar.

Las reparaciones socialistas

El PSdeG pretende compensar el olvido al que De Lara lo condenó con imputaciones que terminaron en nada. Con el archivo de la causa del Garañón, que supuso su dimisión como líder socialista, empezó a atisbarse el final del camino por el desierto al que lo dirigió la jueza. Diez meses después, hace poco más de un año, reapareció en público en la consagración de Formoso como nuevo secretario xeral. En octubre, en la fiesta de los socialistas gallegos celebrada en Oroso, escoltó a la ministra portavoz Pilar Alegría, que sustituyó a un Pedro Sánchez ausente por covid.

La prueba de esa estrategia de reparación está en Ourense, donde se ha rehabilitado al exalcalde Francisco Rodríguez, otra víctima de la instrucción de De Lara, como candidato a las municipales de mayo. Rivalizará, además, con otro exregidor que también fue imputado, el popular Manuel Cabezas. Por ahora, Besteiro guarda silencio —rechazó ayer hablar sobre su futuro con La Voz—, pero el PSdeG ya tiene la camiseta con el 9 a la espalda esperando por su dueño. Y el tiempo apremia: González Formoso necesita saber si podrá optar a seguir como alcalde de As Pontes.

O Garañón será derribado, cumpliendo así las sentencias judiciales
O Garañón será derribado, cumpliendo así las sentencias judiciales

La adjudicación de la demolición del Garañón puede convertirse en símbolo de la rehabilitación de Besteiro

Derribar el Garañón, símbolo de una época convulsa en Lugo, costará 578.035 euros. Esa es la cantidad por la que el Concello adjudicará hoy la demolición a la empresa viguesa Xestión Ambiental de Contratas, que presentó la mejor de las tres ofertas candidatas. Si nada se torciese a nivel de plazos, algo poco habitual cuando se trata de temas tan complejos y con tantas aristas, a finales del mes de mayo, coincidiendo con las elecciones municipales, el edificio debería ser ya historia.

El Garañón puede convertirse así en símbolo de la caída y resurgir, si así lo decide, de Gómez Besteiro. ¿Qué pasó en el 2011 para que este edificio, hoy un esqueleto, causase un terremoto político en la ciudad y por extensión en Galicia?

La jueza De Lara, polémica (y expedientada) por las dilaciones de sus procesos, recibió en el 2009 la denuncia de una posible prevaricación urbanística respecto al plan denominado O Garañón, que se desarrollaba en una parcela de las cuestas del parque Rosalía de Castro de Lugo, y en la que se investigaba un supuesto trato de favor a dos promotores cuando Xosé Orozco era alcalde, y José Ramón Gómez Besteiro su concejal de Urbanismo.

La jueza De Lara apreciaba indicios de que Besteiro había comprado un piso sin pagar parte de su precio ni las obras de reforma, al socio de una constructora que supuestamente había recibido un trato de favor por parte del Concello. Sin embargo, la Audiencia de Lugo criticó a la magistrada de forma contundente: «Ninguna imputación puede basarse en sospechas tan vanas». Los magistrados recordaron en su sentencia que Besteiro aportó documentación y justificó los pagos que hizo. Vieron «creíble» su relato tras «un exhaustivo examen patrimonial».

Por eso, el archivo de la causa contra Besteiro, las sanciones a De Lara y ahora el derribo del Garañón, parecen poner el contador de nuevo en el 2011. Incluso antes, porque el Concello, con la socialista Lara Méndez al frente, ha decidido convertir la parcela en zona verde y dejarla sin edificabilidad alguna.