La Xunta afirma que Galicia recuperará su riqueza previa al covid en el 2023 pese a la crisis energética

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago SANTIAGO

GALICIA

El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, y el conselleiro de Facenda, Miguel Corgos, tras detallar el anteproyecto de presupuestos para el 2023.
El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, y el conselleiro de Facenda, Miguel Corgos, tras detallar el anteproyecto de presupuestos para el 2023. Sandra Alonso

Los presupuestos del 2023 ascenderán a 12.620 millones de euros de los que 9.369 se destinarán a gasto social, son dos cifras récord

18 oct 2022 . Actualizado a las 15:12 h.

El consello de la Xunta ha aprobado hoy martes el anteproyecto de los presupuestos del 2023. Los primeros presupuestos de la era Rueda son también los más elevados de la historia de Galicia: 12.620 millones de euros, 993 millones más que este año. Aunque una de las palabras más empleadas por el presidente en su presentación fue «prudencia», tanto en materia financiera como de gasto. Una prudencia necesaria, dijo, para hacer frente a las «incertezas» que aguardan en el futuro, derivadas de la crisis energética y la inflación. Esas dudas han provocado caídas en las previsiones de crecimiento de los principales países europeos, pero el conselleiro de Facenda, Miguel Corgos, que acompañó al presidente, se mostró seguro de que la economía gallega aguantará el pulso. El PIB anterior a la pandemia del coronavirus se recuperará a comienzos del 2023 y el desempleo caerá por debajo de los dos dígitos, explicó. Pese a las citadas incertezas, y a informes como el publicado por el BBVA esta mañana que reduce el crecimiento de Galicia al 0 % el próximo año, el conselleiro subrayó que el Gobierno tiene «total confianza» en sus previsiones, que parten de las previsiones del IGE y están avaladas por la Airef. «Executaremos o orzamento que presentamos», afirmó el conselleiro.

Los presupuestos no solo son lo más elevados de la historia de Galicia, también baten el récord de gasto social, confirmaron tanto Corgos como el presidente. Esas partidas alcanzan los 9.369 millones de euros, 760 más que en el año anterior. El conselleiro enumeró los aumentos en cada área: «Sanidade, 4.967 millóns, 384 máis [que este año]. Educación, 2.795 millóns, 100 máis; políticas sociais, 1.164 millóns, 177 máis; Emprego, 443 millóns, 48 máis».

Las primeras cuentas de la presidencia de Alfonso Rueda girarán en torno a cinco ejes: la lucha contra los efectos de la inflación mediante ayudas a personas y familias, medidas de ahorro y eficiencia energética, refuerzo de los servicios públicos, cuidado del medio ambiente y prevención de incendios, y dinamización económica.

Todo ello enmarcado en una política fiscal a la baja, que «deixarán no peto dos galegos 128 millóns de euros», señaló Rueda. También en un control reforzado de la deuda, solo se pedirán 181 millones en comparación a los 415 millones de años anteriores. Corgos destacó que el Gobierno gallego sigue así moviéndose en un «modelo fiscal previsible» y por una «senda de responsabilidade» en materia de endeudamiento. El conselleiro destacó que Galicia es la tercera comunidad que menos debe de España, pero, pese a ello, el año que viene tendrá que hacer frente a juros que solamente fueron superiores en el entorno del año 2008, cuando el porcentaje era más elevado. El aumento del gasto financiero es consecuencia del endurecimiento de la política monetaria internacional, señaló, antes de explicar que gracias al control mantenido en años anteriores se podrá limitar ahora el alcance del problema.

Aunque la Xunta nunca ha dispuesto antes de tantos fondos, lo que permitirá el citado incremento del gasto social o elevar las inversiones por encima de los 2.700 millones de euros, el Gobierno gallego también deberá hacer frente a gastos extraordinarios derivados de la situación económica. El desembolso en personal subirá un 6,1 % y superará los 4.600 millones de euros, y también deberá afrontar más gastos en energía y mantenimiento de servicios. Por la parte positiva cabe señalar que la mayoría de los nuevos ingresos son ordinarios, derivados de una mejora de la recaudación. El conselleiro destacó que el «sector público autonómico será motor de crecimiento» el próximo año, y la citada mejora de los ingresos debería ayudar a que siguiese siendo así en el futuro.

Además, las cuentas son —señalaron Corgos y también el presidente— una demostración de la estabilidad institucional de Galicia. La comunidad volverá a tener sus presupuestos aprobados a 1 de enero, y está siendo «das primeiras, se non a primeira» en tramitarlos. Los presupuestos, resumió el conselleiro, están planeados no pensando solo a un año vista, sino que «os facemos mirando ao futuro». Sus cinco líneas maestras se encuadran en el plan estratégico de Galicia hasta el año 2030. Son «os máis altos da historia, pero iso non é o máis importante», añadió, sino que «permitirán acadar o impulso que Galicia necesita», protegiendo a las familias y sectores vulnerables, blindando el crecimiento económico con su impulso a las medidas de medioambientales y de ahorro energético, al tiempo que protegen y fortalecen la sanidad, la educación y los servicios públicos, concluyó el titular de Facenda, quien el jueves defenderá el anteproyecto en el Parlamento.