El Sergas permitirá renovar las recetas a través de su aplicación de móvil

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago SANTIAGO

GALICIA

Paco Rodríguez

Sanidade citará en el 2023 a 75.000 enfermos crónicos que llevan seis meses sin ir al médico

05 oct 2022 . Actualizado a las 15:22 h.

El conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, avanzó esta mañana en el Parlamento una serie de medidas para reducir la burocracia que deben atender los médicos y mejorar así el funcionamiento de la atención primaria. Una de las novedades que presentó es que la aplicación Sergas Móbil incluirá un sistema de alertas para avisar a los usuarios de la caducidad de sus recetas. La aplicación también permitirá renovar las recetas, aunque seguirá siendo posible hacerlo en las farmacias. El sistema informático notificará al farmacéutico y al personal médico la solicitud, que quedará recogida en la historia clínica electrónica del paciente. Si el facultativo decide que la renovación es necesaria y no es necesario examinar antes al paciente, podrá autorizarla también por vía telemática.

El objetivo de la medida, que el PP solicitó en el Parlamento hace unas semanas, es evitar trámites y desplazamientos tanto a los ciudadano como a los profesionales, señaló el conselleiro.

Comesaña, que esta mañana también compareció a petición propia para explicar la convocatoria extraordinaria de plazas de difícil cobertura, afirmó también que se formará un grupo de trabajo para diseñar un sistema que automatice las bajas laborales derivadas de la atención hospitalaria. Ese mecanismo evitará citas innecesarias, porque la baja ya está indicada por el personal hospitalario con los profesionales de primaria.

Además explicó que en los presupuestos del 2023 se incluirá una partida para un programa de actividad extraordinaria con el fin de citar durante ese año a todos los pacientes crónicos y con múltiples patologías que no hayan acudido a una revisión médica en el último medio año. La meta de la Xunta es convocar a 75.000 personas con el fin de evaluar su estado y hacerles las pruebas diagnósticas que sean necesarias.

El conselleiro detalló además las medidas puestas en marcha desde la Xunta durante los últimos meses con el fin de paliar la falta de profesionales. Destacó, entre otras, el acuerdo para compensar a los sanitarios que asuman los cupos de compañeros o que deban hacer horas extras. Según señaló, la atención primaria había atendido en septiembre más de 22 millones de consultas, más de la mitad de ellas de medicina de familia.

También señaló la ampliación de las plazas y las capacitaciones del personal de farmacia y enfermería para asumir tareas que hasta ahora solo podían hacer los médicos. Señaló que los enfermeros pueden hacer ahora el seguimiento de los pacientes con tratamiento anticoagulante oral, lo que evitó unas 100.000 consultas a los doctores. Desde octubre y hasta que termine el año, añadió, se aprobarán 40 nuevos protocolos para que el personal de enfermería pueda pasar consulta de patologías que no requieran presencia médica.

Por otra parte, el personal farmacéutico podrá renovar las recetas de pacientes crónicos. Comesaña recordó que este año se han incorporado 28 nuevos profesionales de esas especialidad a los centros de salud.

El titular de Sanidade destacó también las mejoras en nuevas tecnologías, como el funcionamiento del sistema de atención telefónica, que organiza las llamadas que reciben 162 centros de salud, o el Sistema de Atención da Demanda en Equipo (XIDE), que deriva de forma automática a los pacientes al profesional de la especialidad adecuada. Ese mecanismo ya se ha implantado en 125 centros, que atienden a casi la mitad de los gallegos.

Comesaña necesitó cerca de 28 folios de discurso, señaló, para explicar las medidas que se van a tomar y hacer balance de las aplicadas; y contrapuso esa gestión con la inacción del Gobierno central para aplicar soluciones «estructurais» a la falta de profesionales. Criticó que se siguen sin aplicar los acuerdos alcanzados en el 2018 para reformar el sistema de formación, ignorando así además las votaciones en el Parlamento gallego y el Congreso de los Diputados. Según el conselleiro, las actuales limitaciones al sistema de formación impiden el refuerzo del 70 % de los centros de salud.

La propuesta de la Xunta es que el Gobierno central convoque un mir extraordinario para reforzar el sistema público. Mientras esa medida no se toma, añadió el conselleiro, se seguirán tomando medidas como incrementar en 65 las plazas para medicina de familia, además de la creación de nuevas plazas de profesor en las universidades.

El discurso de Comesaña no convenció a la oposición. Tanto Montse Prado (BNG) como Julio Torrado (PSdeG) denunciaron que la gestión de la Xunta desde el 2009, cuando el PP recuperó la mayoría, han recortado la capacidad del Sergas. El debate se fue crispando en los siguientes turnos, cuando también se discutió la implantación de la cuarta dosis de la vacuna del covid. Comesaña defendió que el Sergas recurra a los vacunódromos y, al mismo tiempo, ofrezca a los mayores que no acudan la posibilidad de inmunizarse en un centro de salud. Prado le afeó el tono vehemente y subrayó que el BNG «non crea alarma», sino que se limita a trasladar «o malestar de milleiros de persoas que non entenden como obligan a desplazarse aos maiores de 80 anos». Torrado también reclamó que se recupere la vacunación en los centros de salud, ante las dificultades que supone para miles de mayores moverse hasta los centro de vacunación.