Formoso exige que las eléctricas aporten más a Galicia en el arranque de su gira por instituciones comunitarias

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago ESTRASBURGO / ENVIADO ESPECIAL

GALICIA

Formoso, con la delegación socialista en Estrasburgo atendiendo a la comisaria de Energía.
Formoso, con la delegación socialista en Estrasburgo atendiendo a la comisaria de Energía.

El líder del PSdeG ofrece a la comisaria de Energía el potencial de la comunidad, pero subraya que los beneficios deben recaer en las concellos y empresas locales

12 sep 2022 . Actualizado a las 20:46 h.

El secretario general del PSdeG, Valentín González Formoso, inició este lunes una visita de tres días a Estrasburgo, donde mantendrá una apretada agenda de reuniones con altos representantes de la Unión Europea. La primera fue la comisaria de Energía, la estonia Kadri Simson, a la que ofreció el potencial de Galicia para salvar la crisis energética causada por la guerra de Ucrania, bajo la condición de que los beneficios de las explotaciones deben recaer en el entorno más cercano, en industrias locales y concellos de la comunidad.

La visita del líder del PSdeG coincide con un pleno del Parlamento Europeo en el que se debatirán las medidas de emergencia contra la crisis energética. La importancia de ese pleno para el futuro económico de la UE en la histórica y silenciosa ciudad alsaciana -una región que en el pasado simbolizó la violenta rivalidad francoalemana pero que hoy es uno de los centros de la paz europea- ha facilitado la apretada agenda de la gira de Formoso.

El secretario general, que estuvo acompañado del eurodiputado socialista gallego Nicolas González, dijo que Galicia no puede «perder a oportunidade» de explotar su capacidad de generación y almacenamiento en un momento de «emerxencia enerxética», cuando las empresas anuncian «paróns produtivos» y las familias afrontan un súbito empobrecimiento por la inflación.

«Non podemos permitir que proxectos especulativos entren no territorio galego», alertó Formoso. Subrayó que las empresas deben estar dispuestas a «aportar ao territorio», a aceptar la participación pública y a hacer un «esforzo de entendemento» con las comunidades locales. Los beneficios de las nuevas explotaciones eólicas o de hidrógeno verde, explicó, deben traducirse en más recursos para «soster e mellorar os servizos públicos». Las plantas y los molinos, añadió, estarán «mellor vistas», si financian una escuela infantil o una residencia de mayores allí donde estén.

El líder del PSdeG no solo propuso a la comisaria ese enfoque social de las nuevas fuentes de energía, también planteó que la UE debe dar facilidades a las industrias ya existentes para acceder a fuentes de autoconsumo. Criticó las numerosas dificultades burocráticas que impiden, por ejemplo, que una granja en un lugar venteado cuente con su propia instalación eólica, y mientras tanto tenga que hacer frente a subidas del 300 % en sus costes de explotación por la subida de la luz y los combustibles.

Además, Formoso pidió a la comisaria Simson que se dé continuidad a los fondos europeos para la transición justa, que compensen a las zonas afectadas por el cambio de los combustibles fósiles a las renovables. Esas aportaciones a fondo perdido de la UE de hasta un 30 % para la puesta en marcha de nuevas industrias ya se están aplicando en A Coruña, una de las provincias más afectadas por el proceso de descarbonización (caso de As Pontes, municipio que gobierna el propio Formoso).

Formoso destacó que la comisaria -adscrita a un partido centrista- «coñece ben» la realidad de Galicia y de otras regiones con alta producción energética, y destacó que la UE está enviando señales «moi contundentes» de su empeño por culminar la transición a las renovables e impulsar un nuevo modelo económico.

Por ese motivo, insistió en que la Xunta «ten que facer moitos deberes», dejar de «esconderse» y hacer una apuesta clara para «non perder unha oportunidade histórica». También pidió al BNG que aprenda de los errores del pasado, entre los que incluyó las críticas a la AP-9 comparándola con una «navallada na terra» o a la llegada de la alta velocidad a Galicia porque iba a desestructurar el país. Por la contra, subrayó que tiene «máis mérito» aceptar el reto energético en el que Galicia «pode ser líder» que «poñerse detrás da pancarta».