El Avril alcanza los 360 por hora entre Ourense y Santiago, récord de velocidad en ancho ibérico

Pablo González
pablo gonzález REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

El Avril, estacionado en Ourense para continuar con las pruebas
El Avril, estacionado en Ourense para continuar con las pruebas

La homologación de los trenes de la serie 106 sigue su curso para poder ser utilizados en Galicia en la primavera del 2023

08 sep 2022 . Actualizado a las 15:39 h.

La peculiar configuración de la red de alta velocidad gallega, con tramos en ancho internacional hasta Ourense y en ibérico desde la capital ourensana hasta el resto de las ciudades, ha permitido batir el récord de velocidad en ancho ibérico (1.668 milímetros) al tren Avril, que alcanzó los 360 kilómetros por hora en un recorrido nocturno en el tramo Ourense-Santiago. La versión de ancho variable de la serie 106, es decir, uno de los trenes que espera Galicia para poder mejorar los tiempos de viaje en las ciudades del eje atlántico, debe alcanzar este registro o superarlo para poder ser homologado a 330. Una velocidad máxima que, no obstante, no podrá ser alcanzado en viajes comerciales, pues el límite en la red española de alta velocidad es de 300 por hora y no hay visos de que se aumente en fechas próximas.

Aunque el tren de muy alta velocidad de Talgo ya había alcanzado en pruebas la velocidad de 363 por hora en su versión en ancho fijo y en líneas con medida internacional (1.435 milímetros) fuera de Galicia, lo relevante es que este registro se alcance en la única línea de alta velocidad estricta en ancho ibérico, como es la que une Ourense con Santiago, lo que supone a su vez un récord del ferrocarril en Galicia. Según fuentes conocedoras de estos procesos de pruebas, el registro máximo anterior en ancho ibérico se situaría en 285 por hora.

Las mismas fuentes, a falta de confirmaciones posteriores, creen que se trata de un récord mundial en material rodante de ancho variable y, también, en anchos de vía diferentes al internacional o estándar, pues la inmensa mayoría de las líneas de alta velocidad tienen esa medida en sus vías. Lo relevante, en cualquier caso, es que estos trenes llamados a circular por la red gallega podrán hacerlo a 300 por hora en el tramo Ourense-Santiago, pese a las dudas que se suscitaron al respecto. No así en el eje atlántico, donde la velocidad seguirá limitada a 200. El récord en líneas de alta velocidad en España se consiguió en el corredor Madrid-Barcelona en el 2006: 404 km/h.

«El hito registrado es una parte más de las exhaustivas pruebas de validación de condiciones de circulación a nivel dinámico hasta una velocidad máxima de 360 km/h en ancho de vía ibérico, como paso previo a su puesta en servicio con una velocidad comercial máxima de 330 km/h», explicó Talgo.

El proceso de homologación, que arrastra distintos retrasos con acusaciones mutuas entre Renfe y Talgo, sigue su curso con el objetivo de que estos trenes puedan ser utilizados en el ámbito comercial en distintas conexiones del país, entre ellas la línea de alta velocidad Madrid-Galicia. Si se cumplen los pasos de la hoja de ruta prevista, podrían estar listos en el primer cuatrimestre del 2023, o a lo largo de la próxima primavera. La conselleira de Infraestruturas e Mobilidade, Ethel Vázquez, aseguró hace unos días que la Xunta carece de información oficial sobre los plazos para la puesta en servicio de estos trenes, que recortarán entre veinte minutos y media hora los tiempos de viaje desde las ciudades del eje atlántico.

Renfe acusó a Talgo de incumplir los términos del contrato para la entrega de 15 unidades de ancho fijo y otras 15 de ancho variable. La empresa fabricante, por su parte, achacó los retrasos a la pandemia y a las dificultades para realizar los ensayos de homologación, algo de lo que culpó al ADIF y a Renfe. Ahora aseguran que, cuando finalicen estas pruebas, «se continuará con la validación dinámica en el resto de tipologías de vías existentes en España, completándose así la certificación de los 15 trenes con rodadura desplazable de los 30 de los que se compone el proyecto», añade la empresa fabricante.

Hay que recordar que en la actualidad los trenes de ancho variable tienen limitada su velocidad máxima a 250 km/h en líneas de ancho internacional, y a 220 km/h en líneas de ancho ibérico, «lo que condiciona fuertemente los tiempos de servicio». Con el Avril -añade Talgo en un comunicado-, los tiempos de viaje se minimizan, ya que es capaz de circular hasta a 330 km/h en líneas de alta velocidad, indistintamente de su ancho de vía».