Miguel Corgos: «Galicia recuperará el crecimiento antes que otras comunidades»

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

PACO RODRÍGUEZ

El conselleiro de Facenda asegura que la estabilización del personal del Sergas y la Xunta continuará

10 jul 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Miguel Corgos López-Prado (A Coruña, 1971) se licenció en Ciencias Económicas y Empresariales en la UDC, donde también hizo un máster en Administración Financiera y Tributaria y un posgrado en Auditoría de Cuentas. Entró en la Xunta como funcionario de la escala superior de la intervención general en el 2000. Nueve años después, tras distintas responsabilidades, Alberto Núñez Feijoo le nombró director xeral de Orzamentos. En el 2021, tras el fallecimiento de Valeriano Martínez, Feijoo le confió la consellería de Facenda. Alfonso Rueda le ha encargado ahora la elaboración de los primeros presupuestos de su presidencia.

—La exposición de motivos que publicó el DOG para preparar el presupuesto era muy exhaustiva.

—Estamos en una situación de cambio y procuramos que explique el porqué de las cosas. Va a ser un presupuesto importante por la coyuntura actual, y tiene objetivos claros: ayudar a las familias, colectivos y empresas que peor pasen la subida de precios. Modernizar y apoyar los servicios públicos fundamentales: educación, sanidad y política social. Y llevar a cabo proyectos con fondos de la UE que ayuden a transformar la estructura económica y a recuperar el crecimiento.

—Han afrontado varias crisis, ¿qué será distinto en estas cuentas?

—No es la misma coyuntura, y hay unos antecedentes. Conocemos la estructura del presupuesto. Las prioridades están bien dotadas en las políticas de gasto y la posición financiera de la comunidad es sólida. Eso nos da una posición más fuerte para encarar las necesidades de gasto extra.

—La exposición prevé una caída del crecimiento, ¿se sabe cuánto?

—Todavía no la tenemos, pero posiblemente la cerremos la semana que viene, porque la vamos a presentar con el techo de gasto. Yo tomo a la centésima lo que me dice el instituto de estadística. Están cerrando sus cálculos, y lo que me digan sera lo que revisemos. Lógicamente va ir en línea con lo que están haciendo el Gobierno de España y otros. La única certeza es que Galicia va a recuperar el nivel de crecimiento previo a la pandemia antes que las demás comunidades.

—¿Por qué?

—Porque resistimos mejor la crisis de la pandemia, y el año pasado crecimos una décima más que la media española. Hemos bajado menos y también tenemos que subir menos para recuperar.

—También hablaba de ajustar el gasto corriente, ¿para recortar?

—No, no para hacer una rebaja, sino para ahorrar en lo contingente y emplearlo en apartados donde suben los precios. No contemplamos un escenario de bajada del presupuesto.

—¿Qué impacto tendrá la subida de la luz en la Xunta? En Sogama se van a disparar los costes.

—La Xunta es un gran consumidor y le afecta como a todas las familias y empresas. Vamos a tener que pagar retribuciones más altas a nuestros empleados, abonar un coste más alto en energía y muchos contratos subirán por la inflación. Es la suma de variables que hemos tenido en cuenta para preparar el presupuesto.

—¿En esta coyuntura es viable seguir consolidando personal del Sergas y otros departamentos?

—Sí, claro que es viable. Es personal necesario, que presta servicios a las personas, y la consolidación solo supone estabilizar a quien ya trabajaba de forma recurrente para la Administración. Redundará en una mejora de sus condiciones y en su rendimiento, por lo que vamos a seguir con el proceso como estaba planificado.

—¿En qué consistirá la modernización de los servicios públicos?

—Va sobre todo por la parte de la digitalización. Tenemos un mundo por delante muy interesante para mejorar los servicios a los ciudadanos. La digitalización debe agilizar y facilitar el acceso a los servicios, y también facilitar el trabajo de los empleados públicos, evitando errores y desviando tareas que deben hacer ahora.

—¿Y las ayudas ante la inflación?

—Hemos tomado medidas fiscales importantes. Bajamos el primer tramo del IRPF del 9,4 % al 9 %, lo que añade progresividad. No es menor tampoco la medida que considera a las familias con dos hijos como numerosas y multiplica la desgravación a las que tengan más de tres. Es muy importante que las familias puedan enviar gratis a la escuela infantil a los niños de 0 a 3 años. No solo desde el punto de vista económico, es la medida más importante en la historia de la comunidad en materia de conciliación e integración en el entorno escolar. Se van a congelar las tasas universitarias y a consolidar otras medidas fiscales anteriores. Todos esos incentivos son importantes y habrá medidas desde el punto de vista del gasto para ayudar a los que peor lo estén pasando.

«El Gobierno debe dar señales de que puede controlar el alza de precios, y no lo está haciendo»

  

Corgos afirma que el retraso en abordar la subida de precios ha dificultado la solución.

—¿Asumió tarde el Gobierno el problema de la inflación?

—Cuando no actúas de inmediato para cortar la subida, lo que pasa es que segundos agentes afectados lo repercuten en sus precios y se entra en una espiral inflacionista. Ahora es muy importante que el Gobierno sea capaz de enviar señales, y no lo está haciendo por ahora, de que es capaz de cortar la subida de precios. Primero debe cortarla, y luego impulsar el pacto de rentas. Dudo que los agentes sociales lo firmen si no ven al Gobierno capaz de frenar la escalada.

—Feijoo planteó bajar impuestos ¿es posible dejar esos ingresos?

—Se planteó como una medida puntual para reducir la factura energética y evitar esos efectos de segunda ronda. Alguna de ellas la esta tomando el Gobierno ahora, como la rebaja del IVA o el cheque de 200 euros, que es una versión del impuesto negativo que proponía Feijoo en la renta. Si consigues frenar una crisis con esas medidas te compensa en los años que vienen. La prioridad debe ser cortar la subida precios, que es difícil y es un fenómeno general en Europa, pero están subiendo más en España que en otros países europeos.

—¿Entiende que el Gobierno no quiera dar prioridad a la reforma de la financiación autonómica?

—Estoy descontento, pero viendo la inacción que tienen en asuntos fundamentales que están comprometidos con Europa, como la reforma tributaria o de la Seguridad Social, entiendo que dejen de lado un asunto que solo nos preocupa a las comunidades autónomas. El sistema no nos proporciona recursos suficientes y es muy inestable, con diferencias importantes que provocan continuas protestas que no son buenas para el estado de las autonomías.

—¿Cómo afectará la subida de precios al reparto?

—El sistema pivota sobre el reparto de una cesta de tributos, y a más repartes más recaudas. El problema es cómo se está repartiendo. Galicia defiende que se debe tener en cuenta el coste de los servicios por la dispersión y también por el envejecimiento. El gasto farmacéutico sube a partir de los 65 años. Esos patrones se deben tener en cuenta, y la Administración del Estado tiene que entender que no todas las políticas evolucionan igual. El sanitario siempre es un gasto creciente y de mayor rango que los demás, incluso sin pandemia.

«Los fondos de la UE van con retraso y el plazo corre rápido»

  

El conselleiro defiende que la experiencia de las comunidades habría facilitado la gestión de las ayuda de la Unión Europea.

—¿Qué pasará con esos proyectos con fondos de la UE? El Gobierno no concreta y el plazo corre.

—Hay un retraso en la ejecución de los fondos Next Generation y el plazo corre muy rápido. Viene del que ha elaborado el plan, porque han querido centralizar todo, pese a la oferta de las comunidades autónomas de ayudar. BBVA Research y Airef dicen que el retraso es de un año, y el plazo es exigente. Tienen que estar adjudicados en diciembre del 2023 y ejecutados en diciembre del 2026. Nosotros vamos a poner todo de nuestra parte, porque son vitales para Galicia. El Gobierno solo ha convocado dos reuniones sectoriales con las comunidades, y una fue para aprobar el reglamento de la comisión. Está siendo una gestión muy complicada y nos estamos enterando de movimientos solo por la web del ministerio. Aún más oculto es el reparto de fondos por Pertes. Estamos deseando que venga el presidente Sánchez a anunciar alguna de las inversiones que comunicamos como prioritaria.

—¿Cuánto perderemos si se recorta producción en Stellantis?

—No contemplamos ese escenario. Lo que no se puede hacer como Gobierno, en un país que además es una potencia en la producción de automóviles, es no tener en cuenta a la principal factoría para su financiación.

—Nadia Calviño dijo que el plan parece hecho para Galicia.

—Pero falta que nos los financien, y no entendemos por qué no se hace. Hemos empezado antes que muchas comunidades, elaborando un plan propio, Next Generation Galicia y estamos trabajando desde entonces en estos proyectos transformadores que se adecúan perfectamente al mecanismo de financiación.